Las medusas velero, también conocidas como ‘barquetes de Sant Pere’ o ‘sabates de Sant Pere’ en Baleares, han adelantado esta primavera su llegada a las playas de Mallorca. Los expertos creen que el cambio climático puede haber acelerado el ritmo de su ciclo de vida lo que puede tener efectos perjudiciales no solo para la especie sino para sus depredadores. Así lo explica Neus Matamalas, técnica de Conservación Marina del GOB.
«La especie, tiene un ciclo de vida que alterna diversas fases y formas. Una de ellas es la forma de pólipo que vemos estos días en las playas, las ‘sabatetes de Sant Pere’. Esta forma de vida ‘pólipo’ forma parte de la biodiversidad que se encuentra en la capa superficial del agua, mar adentro. Lo que ocurre es que se acercan a la costa debido a las corrientes y rachas de viento», relata la experta.
Recuerda que «a principios de primavera suelen tener esta forma y como flotan en el agua, se suelen encontrar en masas enormes. Por eso vemos tanta cantidad en las playas».
La bióloga marina cree tener una explicación de por qué este año parece que se está adelantando la presencia de la medusa en su forma de ‘sabates de Sant Pere: «El aumento de la temperatura del agua puede haber acelerado el ritmo del ciclo de vida y ha hecho que aparezcan antes».
La experta avisa de que «si esta temperatura altera el ciclo, hace que aparezcan las ‘sabatetes’ en el mar en momentos en los que hay temporales y olas y finalmente acabarán en la orilla en lugar de en el mar». Eso impide que puedan completar su ciclo de vida.
«Es importante que haya una cantidad suficiente de esta especie en el mar, porque son alimento de otros organismos, por ejemplo de tortugas marinas juveniles. Aunque en estos momentos, les ‘sabatetes’ no son una especie que se encuentre amenaza, si el aumento de la temperatura del agua continúa, se verá afectada, como muchísimas otras especies», concluye Matamalas.
A diferencia de lo que ocurre con otras medusas, esta forma de vida de pólipo, no pica a las personas.
Antes del clima cambiatico eran 2 ó 3 medusas como mucho las que llegaban a las playas