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El Consell concluye que es necesario acometer reformas en Montesión

Los jesuitas están estudiando el informe de Patrimoni para presentar alegaciones

Los técnicos del Consell que inspeccionaron el complejo de Montesión, en el centro de Palma, detectaron una serie de deficiencias graves que pueden provocar desprendimientos y problemas estructurales, por lo que urge una rehabilitación o reforma de algunas partes del recinto. | R.L.

| Palma |

El informe de 42 páginas del Servei de Patrimonio Històric del Consell, que ha supuesto que se inicien los trámites para declarar BIC (Bien de Interés Cultural) al complejo de Montesión, concluye que el estado de deterioro del edificio está tan acentuado que es imperioso acometer reformas de mantenimiento o rehabilitación.

Tal y como adelantó ayer en exclusiva Ultima Hora, el escrito detalla numerosas deficiencias (grietas, humedades, goteras, desprendimientos...) que los técnicos del Consell detectaron cuando llevaron a cabo la inspección de la iglesia-museo, el convento y claustro y el colegio.

Este periódico se puso ayer en contacto con los jesuitas, para conocer su opinión sobre el informe, que implica la paralización provisional de las obras. Desde la Compañía de Jesús se informó que «estamos analizando la documentación» para presentar las correspondientes alegaciones, en cuanto se abra el plazo legal. En este sentido, añadieron que «no vamos a hacer ningún tipo de declaración en estos momentos del procedimiento».

De igual manera se pronunció la Asociación de Ex Alumnos de Montesión, uno de los colectivos que batalló para que el edificio fuera protegido por la Administración: «Declinamos hacer cualquier tipo de valoración».

Sin embargo, desde Arca (Associació per a la Revitalització dels Centres Antics), otro de los colectivos interesados en que Montesión sea declarado BIC, su presidente, Pere Ollers, explicó que «el Consell ha hecho un buen trabajo con su exhaustivo informe, no hay que obviar que tener ficha de BIC da una garantía de futuro para la restauración del conjunto del inmueble».

Asimismo, indicó que ahora se abre un plazo para que las distintas partes puedan presentar alegaciones «por lo que esto no ha acabado», y que «seguimos pidiendo a la propiedad, sea quien sea, que haya voluntad de restauración. La iglesia, por ejemplo, necesita ‘mà de metge’», añadió.

Desde el Consell, se adelantó ayer que el proceso administrativo se pueda alargar hasta veinte meses, aunque se espera que en un tiempo estimado entre los nueve meses y un año se haya adoptado ya la decisión final sobre el futuro del complejo del centro de Palma. Por último, fuentes de la sociedad que proyecta la rehabilitación y reconversión del edificio declinaron ayer hacer valoraciones a este periódico sobre el tema.

El escrito aborda la ficha técnica del inmueble. Alude, también, al estado de conservación, y determina que es «variable», ya que «nos encontramos ante un conjunto con una evolución constructiva compleja y con varias partes diferenciadas, que dan lugar a una variedad de situaciones en relación a la conservación física».

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