«Muchas empresas del sector de la madera cierran por falta de relevo generacional». Esta es la dura realidad que expresa el presidente de la Federació de Fusta de Baleares, Pedro Payeras, que asegura que uno de los principales retos que tiene el sector es la falta de trabajadores, lo que les está obligando a renunciar a realizar algunos trabajos; además, el tiempo de espera de los que aceptan oscila entre los 3 y los seis meses.
Payeras detalla que se trata empresas familiares en las que «los descendientes no desean o no pueden asumir el negocio;y tampoco ningún empleado actual está interesado en hacerse cargo de la empresa». Para mitigar esta situación, en los últimos años la Conselleria d'Empresa, Ocupació i Energia ha implementado un plan a nivel balear dirigido a empresas con dificultades para asegurar su continuidad. Su objetivo es identificar candidatos que puedan asumir las riendas de estas empresas; así como ofrecer apoyo en la creación de planes de viabilidad, con el fin de evitar su cierre y promover la sostenibilidad a largo plazo de estas carpinterías. «Este esfuerzo es crucial para preservar la tradición y la experiencia acumulada en el sector de la madera, al mismo tiempo que se fomenta la modernización y adaptación de las empresas a las nuevas demandas del mercado», argumenta.
Otro de los factores que inciden en la falta de trabajadores es que el elevado coste de vida de las Islas. «Hemos notado que cada vez hay menos profesionales de la Península dispuestos a trasladarse a Baleares para trabajar en nuestro sector. La escasez de mano de obra no es un problema exclusivo de Baleares; otras comunidades autónomas, con las que colaboramos a través de UNEmadera, también enfrentan dificultades para encontrar personal cualificado. Sin embargo, en nuestro caso, esta situación se agrava por el elevado costes de vida, particularmente el acceso a la vivienda, lo cual dificulta aún más la atracción de talento».
En definitiva, el presidente de la Federació de Fusta de Baleares advierte que las carpinterías y empresas del sector de la madera y el mueble enfrentan una notable escasez de personal. La falta de trabajadores es uno de los mayores retos que afrontan estas empresas, ya que la ausencia de mano de obra cualificada limita su capacidad de crecimiento y afecta negativamente su productividad.
¿Los perfiles que más escasean?
Payeras expone que, en general, se necesitan todo tipo de perfiles, pero la mayor demanda se concentra en trabajadores cualificados, como oficiales, técnicos intermedios y técnicos superiores. «En los últimos años, el sector ha experimentado una transformación hacia la modernización, apostando por una digitalización e inversión en tecnología, tanto en maquinaria, como en software de última generación. Por ello, también se observa una gran demanda de técnicos especializados en programación y manejo de maquinaria avanzada, perfiles clave para el desarrollo y competitividad de las empresas en el entorno actual».
Este problema no es nuevo, aunque se ha acentuado significativamente en los últimos años. «El sector de la madera en Baleares enfrenta una gran demanda debido a su presencia en dos de los principales motores económicos de la región: la construcción, tanto de obra nueva como de rehabilitación, y el sector hotelero, con la constante renovación de la infraestructura hotelera, no solo en las Islas, sino también a nivel internacional».
Además, subraya que «la madera está viviendo un auténtico auge al ser reconocida como el material más ecológico, lo que la convierte en una opción preferida en un contexto de creciente conciencia medioambiental. A esto se suman los nuevos usos que se están desarrollando, como la construcción industrializada de edificios, que ya es una realidad y está revolucionando la manera en que se utilizan los materiales en grandes proyectos arquitectónicos. Estos factores hacen que la demanda de trabajadores cualificados sea aún mayor».
¿Cómo podría solucionarse?
Preguntado por posibles soluciones, la Federació de la Fusta apuesta «de manera decidida por la formación en todos los niveles. Esto abarca tanto a las personas que buscan empleo como a los profesionales del sector, mediante programas de formación continua que permiten actualizar sus conocimientos y habilidades de manera constante».
Payeras destaca que «en colaboración con UNEmadera, entidad que también presido a nivel nacional, y con la CAEB, de la que somos miembros activos, estamos trabajando estrechamente con administraciones públicas, orientadores y centros de formación. Por un lado, es fundamental mostrar a la sociedad cómo opera actualmente el sector de la madera, con empresas altamente digitalizadas y que utilizan tecnología de última generación. Por otro, debemos atraer a los jóvenes, destacando que es un sector donde pueden desarrollar su creatividad y crecer profesionalmente de manera continua. Una de las iniciativas más destacadas es nuestra estrecha colaboración con el Ajuntament d'Inca y la Cámara de Comercio, junto con la financiación del SOIB (Servei d'Ocupació de les Illes Balears), que ha permitido la realización, hasta la fecha, de siete convocatorias de formación dual en madera en la isla de Mallorca».
A su modo de ver, «este proyecto es clave para ofrecer formación especializada a los futuros profesionales del sector, quienes, gracias a este programa, pueden combinar formación teórica con experiencia práctica en las empresas del sector, facilitando su inserción laboral que tanto necesita la industria de la madera». Además, avanza que junto con CAEB impulsamos iniciativas como el proyecto Embajadores FP, que tiene como objetivo dar a conocer en las escuelas las oportunidades que ofrece nuestro sector. Queremos mostrar que este es un trabajo de alta calidad, sino que también ofrece posibilidades reales de desarrollo profesional y personal. Además, través de la FP Dual, cada vez se están ofertando más estudios específicos que permiten formar a nuevos profesionales, quienes, gracias a esta modalidad educativa, tienen la ventaja de una rápida integración en el mercado laboral y en empresas del sector».