Unas 815 personas sin hogar han sido atendidas por tres entidades de la Iglesia -Càritas, Sojorn y la Sapiència- en 2023 en Mallorca, muchas de ellas pese a tener un empleo indefinido y empujadas por los altos precios del alquiler de la vivienda.
Así lo han explicado representantes de las tres entidades este miércoles en una rueda de prensa, en la que han presentado varias acciones de sensibilización y concienciación de cara al Día Mundial de las Personas Sin Hogar, que se conmemora este sábado. Según ha alertado la técnica del servicio de personas sin hogar de Cáritas Mallorca, Teresa Riera, la vulnerabilidad de muchas personas, solas o familias enteras, siguió creciendo el pasado año debido al «aumento día a día del precio de la vivienda».
«Hoy, hablar de sinhogarismo es hablar de falta de vivienda, única y exclusivamente», ha incidido. Por su parte, el director de la Sapiència, Toni Moyà, ha apuntado al incremento de casos de personas que se encuentran en situación de calle pese a tener un contrato indefinido con el que no llegan a final de mes, o de mayores de 75 años que ni pueden costearse una vivienda ni tienen derecho a ingresar en una residencia pública.