Mallorca se convierte esta semana en pionera en la transición hacia las energías limpias como piedra angular de un proyecto que pretende demostrar el potencial del hidrógeno renovable para la descarbonización y el desarrollo económico de las islas en todo el planeta. Será este jueves cuando Redexis ponga en marcha el primer hidrogenoducto de España que inyectará hidrógeno verde desde la planta de Lloseta a la posición de Cas Tresorer en Palma, punto de partida de las redes de transporte y distribución de gas de la Isla.
Más de 115.000 hogares y 2.000 consumidores terciarios e industriales se beneficiarán de una acción que forma parte del proyecto de ámbito internacional 'Green Hysland' por el que se pretende avanzar hacia la consecución de los objetivos cero emisiones de 2050. Mallorca se erige de esta manera en el primer hub de H2 del suroeste de Europa por el que se desarrollará una hoja de ruta con una visión a largo plazo para el desarrollo de una economía de H2 generalizada en la Isla y extensible a Balears, con el reto de replicarse en Madeira, Tenerife, Aran, Islas Griegas y Ameland así como en Chile y Marruecos.
Según explica el proyecto 'Green Hysland' de Redexis «el hidrógeno está llamado a aumentar la penetración de las energías renovables en el sistema energético balear, al acoplamiento de los sectores eléctrico y gasista, así como a la integración de todos los sectores energéticos de la isla, avanzando hacia la completa descarbonización de su economía regional».
La previsión es que se puedan inyectar hasta 575 T/año (19.147 MWh/año) y alcanzar una reducción de emisiones de hasta 3.829 T CO2 tras una inversión de tres millones de euros el hidrogenoducto de 3,2 kilómetros de longitud permitirá la interconexión de los puntos de producción y consumo, y el funcionamiento integrado de las seis ubicaciones de despliegue. Desde Lloseta hasta una terminal de ferris en el Puerto de Palma pasando por Cas Tresorer, un hotel de Ciutat y la estación de repostaje de Hidrógeno (hidrogenera) en las cocheras de la EMT en Palma.
Entre las virtudes que emanan del nuevo hidrogenoducto destaca el hecho de que sea una forma segura de descarbonizar el abastecimiento energético en las Islas así como todos los sectores relacionados, en el corto plazo y disminuir la dependencia de combustible del continente y reducir los costes de electricidad.
La secretaria de Estado de Energía, Sara Aaegesen, la presidenta del Govern, Marga Prohens, y el consejero delegado de Redexis, Fidel López Soria, asistirán a la puesta en marcha en Cas Tresorer de la infraestructura se enmarca en el proyecto de subvención europea Green Hysland, conformado por más de 30 organizaciones, empresas y centros tecnológicos, entre los que se incluye Enagás, Acciona Energía y Cemex.
Cabe destacar que la Unión Europea, a través de la Clean Hydrogen Partnership, ha comprometido diez millones de euros para apoyar el despliegue de las infraestructuras y que en el caso de Mallorca el proyecto ha sido declarado Proyecto Estratégico por el Govern y cuenta con el apoyo del Gobierno Nacional a través del IDAE (Instituto Español para la Diversificación y Ahorro de la Energía) y el Ministerio de Industria.