La alta demanda turística, sumado a un temporada que cada año se alarga más en Mallorca, compromete la disponibilidad de los autocares que los centros educativos alquilan para llevar a cabo excursiones durante el curso. Las empresas priorizan llevar turistas en vez de alumnos, afirman desde los centros y la federación de familias.
Es un hecho cada vez más recurrente y durante los meses del curso que coinciden con el inicio de la temporada turística se registraron diversas quejas por esta situación que compromete las salidas que organizan los colegios e institutos. Desde la patronal del transporte, sin embargo, niegan que sea algo generalizado y dicen que solo pasa puntualmente ciertos días de junio.
«Es un tema de mercado: no hay autobuses porque prefieren llevar a turistas», considera la presidenta de la Federació d’Associacions de Pares i Mares (FAPA) de Mallorca, Cristina Conti. La entidad ha recibido quejas de familias con hijos en centros que han tenido dificultades para contratar autocares. «Estas salidas forman parte de los proyectos educativos, algunas son de ocio, pero también para fomentar la cohesión o la divulgación científica, por ejemplo. Y todo esto queda comprometido», lamenta Conti. No obstante, desde la Conselleria d’Educació se limitan recordar que la contratación de los autocares es competencia de cada centro.
«Lo notamos especialmente en los meses en que la demanda turística es más intensa», comenta la presidenta de la Associació de Directors i Directores de Infantil y Primaria de Mallorca y directora del CEIP Ses Rotes Velles (Calvià), Joana Maria Mas. «El curso pasado tuvimos un problema en la escuela y nos vimos obligados a coordinarnos con otro centro para poder hacer una salida al teatro, aunque al final no hizo falta», señala la docente sobre una situación que «entorpece» la gestión de las excursiones escolares y que también afecta a los institutos de Secundaria.
El presidente de la Federació Empresarial Balear de Transport (FEBT), Rafael Roig, admite que se ha producido esta situación, pero solamente durante unos quince días en pleno junio, cuando coinciden viajes de estudios, turistas, congresistas y excursiones escolares. «Si se planifica adecuadamente no habrá ningún problema porque hay suficientes empresas y vehículos para atender la demanda», asegura el responsable patronal, que insiste en que es un problema puntual.
El pasado junio 140 alumnos del CEIP Maria Antònia Salvà vieron retrasada su excursión porque el autocar transportaba a turistas antes de ir a recogerles.