El ictus es la primera causa de muerte entre las mujeres y la tercera entre los hombres y se estima que una de cada seis personas sufrirán uno a lo largo de su vida. Precisamente, en los dos últimos años se han incrementado un 43,3 % en Baleares, según han informado desde Son Espases, que ha ampliado la unidad destinada a tratar esta patología para poder hacer frente a esta demanda.
Teniendo en cuenta todos estos datos es muy importante que sepamos detectar un ictus. Desde el Hospital de referencia de Baleares han explicado que los síntomas más evidentes son «la pérdida de fuerza en mitad del cuerpo, la pérdida de la visión de un ojo o la dificultad para hablar y comprender son los principales síntomas del ictus».
Ante cualquiera de estas señales de alerta es importante llamar al 061, que «está preparado para atender convenientemente estos casos y trasladar al paciente a un centro hospitalario» más cercano. El tiempo es un elemento fundamental, ya que mientras antes se pueda atender esta patología, más posibilidades de éxito tiene la recuperación. «Si se avisa con tiempo para aplicarle un tratamiento fibrinolítico, se activa el código ictus, que permite poner en alerta no solo a los profesionales del 061 sino también a los de urgencias del centro hospitalario, el neurólogo de guardia y todos los profesionales que participan en el proceso de diagnóstico y tratamiento. En el caso de un ictus isquémico, este puede consistir en un tratamiento médico o fibrinolisis o bien en un tratamiento endovascular o trombectomía mecánica», han manifestado las fuentes citadas con anterioridad.
¿Qué hacer para evitar un ictus?
La prevención también es muy importante y, «aunque el ictus se produce de repente, en la mayoría de los casos hay unos factores de riesgo». En concreto, hay unos que no se pueden modificar, tales como la edad, el sexo y los antecedentes familiares; pero hay otros que se deben controlar y modificar para reducir el riesgo y prevenir el ictus, tales como mantener una dieta rica y saludable, baja en sal y en grasas.
Otros consejos para prevenir los casos de ictus son no fumar ni consumir drogas, no beber alcohol en exceso, seguir una dieta sana y equilibrada, realizar ejercicio moderado, controlar el sobrepeso, disminuir el estrés y planificar con el personal sanitario de Atención Primaria los controles de tensión arterial, colesterol y azúcar en sangre.