La alta demanda de familias que quieren escolarizar a sus hijos en ‘escoletas' públicas o privadas de Mallorca es tan alta que muchas se quedan sin plazas por una cuestión de puntos. Diversas familias han contactado con este diario para denunciar situaciones que consideran injustas por cómo la Conselleria d'Educació establece los criterios de baremación.
«Soy una madre trabajadora monoparental que se ha tenido que reducir la jornada para poder conciliar, lo que implica cobrar menos; además, vivo con mi madre, que no tiene coche, y me es imposible llevar a mi hijo de 10 meses fuera del municipio, como quizás me proponga la Administración», lamenta Susana Rodríguez. «Me dieron un punto por ser monoparental, lo cual me parece muy poco, y otros dos por zona, ya que vivo en Santa Catalina. Residí once años en este barrio, pero durante cinco meses me empadroné en Pollença por trabajo y ahora me penaliza: hasta 10 ‘escoletas' me han denegado plaza. Al cobrar menos, una privada es más cara; en cambio, si estuviera en paro, sumaría más puntos», añade.
A Mari Carmen Muñoz le han denegado plaza en ocho ‘escoletas' de Inca. «Si no puedo ir a una privada, el año que viene me tendré que ir al paro», dice indignada, y reclama que se tenga en cuenta a los trabajadores que no tienen la posibilidad de apoyarse en la familia. «Se llenan la boca diciendo que la etapa 0-3 años es gratuita, pero no ofrecen más plazas, o al menos suficientes», se queja Muñoz, que está a media jornada para cuidar a su hijo y solo cobra 800 euros.
Ante estos problemas, que afectan a unas 20 familias que se han puesto en contacto con este diario, la Conselleria segura que toman nota para ver si es necesario revisar la baremación para el próximo curso.