Unos 250 propietarios de Baleares han solicitado ayudas para la prevención de incendios forestales en sus fincas, casas o instalaciones. La Conselleria de Medi Natural ha habilitado 1,7 millones de euros para estas subvenciones, cuando en la convocatoria anterior, hace unos años, se quedó en el millón de euros.
Estos datos han sido aportados este lunes por el conseller, Joan Simonet, y el jefe del Servei de Gestió Forestal, Joan Santana, durante la presentación del dispositivo de extinción de incendios forestales para la campaña 2024. El plazo de petición de ayudas finalizó el pasado 31 de mayo y, en términos generales, se ha presentado 130 solicitudes en Mallorca, 70 en Pitiusass y 50 en Menorca.
Las subvenciones servirán, en parte, para continuar eliminando la masa boscosa resultante del temporal Juliette, en febrero del año pasado. Según los cálculos de Joan Simonet, las peticiones se resolverán durante el verano para que, el próximo invierno, los propietarios puedan realizar las actuaciones de prevención para las que han solicitado ayudas, sea a través de la contratación de empresas externas o con medios propios. Simonet también prevé que, con estas ayudas, se podrá actuar sobre unas 250-300 hectáreas, «cuyos efectos de prevención se trasladan también a las hectáreas vecinas. Si a ello le sumamos las actuaciones que realice el propio Institut Balear de la Natura -Ibanat-, pueden ser unas 500 hectáreas las que se vean beneficiadas en prevención».
La presidenta del Govern, Marga Prohens, acompañada por Simonet, ha visitado este lunes el aeródromo de Son Bonet para presentar el dispositivo interinsular de extinción y, a su vez, la campaña de sensibilización entre la población -residentes y turistas- ante el riesgo de incendio. Este año, ya se han producido en Baleares 42 incendios forestales que han quemado casi 70 hectáreas, 50 de ellas en s'Albufera de Mallorca hace dos sólo semanas.
Prohens apeló «a la responsabilidad, la prudencia y la precaución para evitar el fuego. Todos tenemos que estar en alerta máxima y ser protagonistas en la prevención para proteger el medio ambiente y las vidas humanas, incluidas las de los efectivos de extinción, a quienes tenemos que agradecer su compromiso, más allá de lo profesional, en la defensa del patrimonio natural».
Un total de 350 personas componen el operativo de extinción, que cuenta, como medios aéreos, con cinco helicópetros y cinco aviones, dos de ellos aportados por el Gobierno central.
Otra novedad de este año es que los correfocs de las fiestas patronales podrán realizarse en el interior de los núcleos urbanos sin necesidad de solicitar autorización. La pirotecnia lanzada al aire (fuegos artificiales) sí deberá pedir autorización si se localiza a menos de 500 metros de suelo forestal. En caso de riesgo extremo de incendio, se suspenderán estas autorizaciones.