Baleares ha registrado este pasado mes de abril un récord de empleo: nunca había habido tantos afiliados a la Seguridad Social y tan pocos parados desde que hay registros (año 1996). En concreto, en el cuarto mes de 2024 había 28.225 desempleados y 589.965 afiliados a la Seguridad Social. Se trata de cifras históricas, ya que se puede hablar prácticamente de pleno empleo antes del inicio de la temporada alta turística; también es importante tener en cuenta que la Semana Santa, que siempre genera demanda de trabajadores, se ha celebrado en marzo.
El conseller d'Empresa, Ocupació i Energia, Alejandro Sáenz de San Pedro, realiza una valoración «muy positiva» de estos datos. «Este mes de abril había en Baleares casi un 9 % menos de personas desocupadas si lo comparas con el mismo periodo del año anterior. Además, es el segundo mes consecutivo en el que la tasa de desocupados se sitúa por debajo de las 30.000 personas, en concreto son 28.225, y el paro administrativo está muy por debajo de la media nacional al situarse en el 4,7 %».
A su modo de ver, «podemos hablar sin miedo de que estamos en una situación, prácticamente, de pleno empleo» y precisa que el Govern tiene «el reto de garantizar la calidad de ese pleno empleo, además de la seguridad y la salud laboral de todos y cada uno de los y las profesionales de las Islas». En este punto, asegura que «lo estamos haciendo ya, a través de iniciativas, convocatorias de ayudas y diferentes proyectos que promueven la conciliación y la corresponsabilidad familiar; así como la igualdad de género, la lucha contra la siniestralidad laboral y contra la brecha laboral a través del IBASSAL (Institut Balear de Seguretat i Salut Laboral)». El conseller insiste en que están «reestructurando y dotando de los recursos necesarios a este organismo para que pueda cumplir con sus objetivos, que se resumen en el bienestar de todos los trabajadores baleares y la reducción de la siniestralidad en el trabajo».
Falta de personal cualificado
Sáenz de San Pedro apunta que «otro de los retos que afrontamos desde la Conselleria es la falta de personal cualificado, especialmente en algunos sectores que requieren trabajadores muy específicos para empleos de difícil cobertura. Para ello, y en constante colaboración entre el SOIB y la Conselleria d'Educación, estamos diseñado y convocando diversos programas y cursos de formación profesional cualificada. La idea no es otra que dar cobertura a esos puestos de trabajo que permanecen vacantes por esa falta de mano de obra preparada y, a la vez, ofrecer nuevas e interesantes oportunidades laborales a todos los ciudadanos».
También considera «básico mejorar la productividad y la competitividad del tejido empresarial de las Islas para mantener en el tiempo esos datos positivos, seguir creciendo y posicionar nuestro mercado laboral, tanto en el ámbito nacional como internacional, luchando contra la estacionalidad». Otro de los retos que ha asumido su departamento es el de dar una solución al «problema del relevo generacional en el sector empresarial del Archipiélago, especialmente arraigado en comercios tradicionales familiares que, por lo general, son pymes y micropymes. Para dar respuesta a esta disyuntiva, desde la dirección general de Empresa y desde el IDI (Agència de Desenvolupament Regional Balear), estamos trabajando en diferentes políticas activas que pongan remedio a este reto».
«En definitiva, los datos son muy buenos, pero hay mucho por hacer y el Govern está centrado en ello: en mejorar la productividad de la economía balear, a la vez que trabaja por garantizar la calidad del empleo y la salud y la seguridad de todos los trabajadores». Por último, «quiero destacar y poner el foco en el importante trabajo realizado por los diferentes sectores empresariales de las islas, que han impulsado en positivo estos datos gracias a su esfuerzo».