La campaña de declaración de la renta y patrimonio de 2023 llega cargada de novedades. Una de las más destacadas es que los ciudadanos de Baleares tendrán más desgravaciones que nunca,con la finalidad de que pueden tener más dinero disponible; la otra es el cambio en las fechas para presentarla.
El acceso a la vivienda es uno de los principales problemas que tienen los ciudadanos de Baleares. Por ello, aumenta la deducción autonómica por el arrendamiento de la vivienda habitual. Los contribuyentes menores de 36 años y también los mayores de 65 años que no ejerzan ninguna actividad laboral o profesional se podrán deducir un 15 % y pasar de un máximo de 440 euros a 530 euros anuales. Esta rebaja fiscal aumenta hasta el 20 % hasta un máximo de 650 euros anuales para los que tengan menos de 30 años y cuenten con una discapacidad igual o superior al 33 %. Estos colectivos también verán incrementada la deducción por gastos de adquisición de libros de texto: pasarán de 220 euros por hijo a 350 euros.
Además, se mantienen los 400 euros para afrontar el aumento de los intereses y las hipotecas variables. En este caso, sólo podrán beneficiarse aquellos que no tienen la deducción estatal por vivienda habitual. Además, se desgravará el 30 % de las rentas obtenidas por el arrendamiento de viviendas de larga duración (cinco o más años) hasta un máximo de 3.600 euros.
Conciliación familiar
En la campaña de la renta de 2023 también hay medidas en favor de la conciliación familiar. En concreto, se aumenta la deducción por gastos relativos a descendientes menores de seis años por motivos de conciliación. Podrán beneficiarse las familias que lleven a sus hijos a escoletes de 0 a 3 años; así como a servicios de custodia, comedor y actividades extraescolares de niños de 3 a 6 años en centros educativos. También se aplica para la contratación laboral de una persona para cuidar al menor. La deducción será del 50 %, con un máximo de 900 euros anuales, cuando el contribuyente sea menor de 36 años, una familia monoparental o numerosa o tenga una discapacidad igual o superior al 33 %.
Otra de las novedades es que las familias numerosas y monoparentales, en las tres deducciones mencionadas -por el arrendamiento de la vivienda habitual, por la compra de libros de texto y por los gastos por conciliación-, podrán incrementar la base imponible máxima de 52.800 euros en tributación de conjunta o de 33.000 euros en tributación individual.
Los contribuyentes con personas mayores de 65 años a su cargo tienen derecho a una deducción del 40 % de los gastos por cuidarlas: estancias en centros de día, servicios de comedor o contratación de cuidadores, etc. El máximo a desgravar es de 3.600 euros.
También se aplica una deducción de 1.800 euros por cada descendiente que dependa económicamente del contribuyente y curse los estudios fuera de la isla del Archipiélago balear en el que se encuentre la residencia habitual del contribuyente, con el límite del 50 % de la cuota íntegra autonómica.
Una de las 'medidas estrella' del Govern de Prohen es la nueva deducción por nacimiento y adopción: 800 euros por el primer hijo, 1.000 por el segundo, 1.200 por el tercero y 1.400 por el cuarto y siguientes. Se aplica con carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2023 y a partir del segundo semestre de 2024 también se podrá cobrar por adelantado, similar a un 'cheque bebé' en lugar de esperar a la campaña de la renta.
En materia de empleo, se aplicará una deducción del 30 % de la cuota autonómica para los trabajadores que estén ocupando plazas de difícil cobertura.
Cambio de fechas
Otra de las novedades más importantes que los contribuyentes deben tener en cuenta este año a la hora de rendir cuentas con Hacienda es que se ha producido un cambio en las fechas. De este modo, la presentación de las declaraciones de IRPF y del Impuesto de Patrimonio comenzará el 3 de abril para los contribuyentes que lo hagan a través de internet, ya sea a través del programa Renta Web o de la aplicación móvil. Sin embargo, los contribuyentes que prefieran entregar su liquidación por teléfono tendrán que esperar hasta el 7 de mayo; mientras que los que opten por acudir de manera presencial a las oficinas no podrán hacerlo hasta el 3 de junio. Para todos las opciones la campaña de la renta y patrimonio finalizará el 1 de julio, aunque los contribuyentes con declaraciones a pagar que deseen domiciliar el pago tendrán que entregarlas antes del 26 de junio.