El médico forense jubilado Miquel Timoner y la médica forense, especialista en Criminología y profesora asociada de la UIB Ana Belén García ofrecen este martes a las 19.00 horas en la Reial Acadèmia de Medicina la conferencia Medicina Forense a les Illes Balears: Història i Protagonistes.
Timoner y García precisan que «la medicina forense, también llamada legal, ayuda a los jueces en los casos en los que se precisan conocimientos médicos o biológicos, principalmente en los referidos a salud general, lesiones, muertes violentas -tráfico, homicidios, suicidios-, violencia contra la mujer, salud mental o capacidades. Los forenses son ahora un cuerpo nacional superior dependiente del Ministerio de Justicia a través de un instituto de medicina legal, pero en épocas pasadas cada uno de ellos estaba adscrito a un juzgado».
Los dos médicos señalan que «desde 2020, los forenses acceden a su especialidad por la vía del Médico Interno Residente -MIR-, con todos sus procesos de formación y rotación. Esta novedad es indudablemente positiva, pues supone un salto en la formación. Con anterioridad, accedían por una oposición a la que seguían unos cursos y unas prácticas».
Timoner indica que «con el Instituto de Medicina Legal -Baleares tiene el suyo-, hay más medios humanos y materiales , pero se ha perdido la relación humana y directa entre juez y forense». Actualmente, hay en 17 médicos forenses en Mallorca, 4 en Eivissa («aunque deberían ser 5», precisan) y 2 en Menorca. Según García, «son pocos. Tenemos la misma plantilla que Badajoz, cuando aquí la población se multiplica en verano y también se incrementan factores como el consumo de alcohol y estupefacientes, las agresiones sexuales o las prácticas de riesgo. Los forenses también tienen vacaciones, por lo que en época estival baja la plantilla y sube el trabajo».
En Mallorca, hay tres forenses dedicados a las autopsias, que se practican cuando hay muertes violentas o sospechosas de criminalidad. Sólo en Mallorca se practican unas 700 al año. Una cuestión que merece una atención especial es el de los suicidios. Ambos médicos destacan que «hay 11 suicidios diarios en España. En muertes entre la población menor de 30 años, los suicidios ya han superado a los accidentes de tráfico. En este aspecto, existe un problema de salud mental que sigue siendo una asignatura pendiente».
La medicina legal se implantó en toda España en 1915, aunque los primeros datos de su actividad en Balears corresponden a principios de los años 20. El Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses se creó en Balears en 2003, por lo que ha cumplido 20 años.
Miquel Timoner recuerda que «el primer caso de reclamación de paternidad en España ocurrió en Mallorca, a principios de los años 80, con la hija extraconyugal del multimillonario algaidí Andreu Oliver. Ese caso estuvo en los juzgados durante ocho años».