El Consell de Mallorca ha puesto en marcha una línea de ayudas dotada con 2,5 millones de euros para particulares afectados por la borrasca Juliette, que generó daños en la isla el pasado mes de febrero. Según ha informado la institución insular, que gestiona estas ayudas a través de su departamento de Promoción Económica y Desarrollo Local, con esta línea se competa otra del mismo importe aprobada en octubre y dirigida a los ayuntamientos.
El presidente del Consell, Llorenç Galmés, se ha mostrado satisfecho por cumplir su promesa de acelerar el despliegue de estas ayudas, que llevan «meses de retraso por culpa de la inactividad del anterior equipo de gobierno».
La conselleraa de Promoción Económica, Pilar Amate, ha remarcado el esfuerzo realizado por su departamento para «solventar las numerosas deficiencias que presentaban las convocatorias, a fin de que los damnificados pudieran recibir las ayudas lo antes posible».