El Institut Mallorquí d'Afers Socials (IMAS) destina recursos propios mediante créditos extraordinarios a proyectos que puede pagar con fondos europeos que ya tiene adjudicados, sobre todo después de que la Comisión Europea haya ampliado hasta 2025 los plazos de ejecución de los proyectos de centros de menores y hasta 2026 los de residencias para mayores del IMAS.
El IMAS lleva este jueves al pleno una petición de crédito extraordinario de 4.396.038,91 euros para crear 50 plazas residenciales para menores con la adquisición de un inmueble para acoger menores extranjeros no acompañados y de otros dos para la acogida residencial de adolescentes. Justifica el crédito en la actualización al alza del precio de la vivienda y en «no haber cumplido los hitos acordados en el convenio con la CAIB de los fondos Next Generation y, en previsión de que tendrá que retornar esta financiación no ejecutada, se quiere llevar a término el proyecto con financiación propia».
El pasado 15 de agosto, apenas un mes después de entrar a gobernar, el conseller de Benestar Social del Consell de Mallorca y responsable del IMAS, Guillermo Sánchez, ya avanzó la pérdida de más de siete millones de fondos europeos y culpó de ello al anterior equipo de gobierno progresista. Guillermo Sánchez, afirmó que, de las seis actuaciones que se tenían que llevar a cabo para ampliar instalaciones de residencias de ancianos y de centros de menores, solo una, la del centro residencial Miquel Mir, se ejecutará a tiempo para recibir fondos de la UE, antes del 31 de diciembre. Y que el resto tendrían que ser pagados por el Consell en solitario: las obras en el centro de la Bonanova, la reforma del centro de menores de Puntiró, la compra de un solar para un centro de acogida de menores extranjeros, la elaboración de un pliego para adquirir pisos para menores tutelados y la reforma del edificio de Llar dels Ancians.«Denunciamos la gran mentira que ha supuesto para el IMAS la gestión de los fondos europeos. Han dejado perder las aportaciones», manifestó entonces Sánchez.
Lo cierto es que la cúpula del IMAS tiene conocimiento desde principios de este mes de octubre de que la Comisión Europea, a petición del gobierno español, ha aprobado una adenda al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia español que contempla ampliaciones de los plazos de cumplimiento y ejecución de muchos hitos y objetivos, entre ellos los del IMAS. Para los hitos fijados inicialmente para el 31 de diciembre de este año 2023, el nuevo documento amplia ahora el plazo de ejecución hasta el cuarto trimestre de 2025 en el caso de los centros de menores, y hasta el segundo trimestre de 2026 el de plazas residenciales, no residenciales y centros de día.
Además, el convenio de colaboración para la ejecución de proyectos a cargo de los fondos europeos que firmaron CAIB e IMAS durante la anterior legislatura establece la posibilidad de modificarlo si todas las partes están de acuerdo. Una modificación que se antoja necesaria con el cambio de fechas ahora dispuesto por la Comisión europea.