La presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, ha defendido este miércoles que no se pueden permitir «de ninguna manera» los recortes en materia lingüística y de normalización del catalán uno de los elementos diferenciales del Estatut d'Autonomia, que contiene el mandato político para el impulso de la lengua propia. La líder del PSIB en Baleares ha participado en la primera sesión de unas jornadas por los 40 años del Estatut d'Autonomia organizadas por la Fundación Gabriel Alomar y ha resaltado, precisamente, que la consideración del catalán como lengua propia es uno de los elementos fundamentales del texto estatutario y que ahora está sufriendo en Baleares «recortes evidentes».
Durante su intervención, Armengol se ha mostrado partidaria de abrir el diálogo para una reforma estatutaria, la quinta, para que el texto se desarrolle durante otros 40 años. La presidenta de la Cámara Baja ha propuesto una reforma en tres direcciones. De este modo, reivindica un Estatut que haya «irreversibles» los derechos conquistados y garantice la sostenibilidad financiera de las competencias en materia sanitaria, educativa, social y de derecho de acceso a la vivienda. Para Armengol, un nuevo Estatut deberá contar con nuevas herramientas para avanzar en cuestiones como la protección de datos, la ciberseguridad y la soledad no deseada. Al mismo tiempo, ha reclamado un fortalecimiento de la estructura de participación y diálogo social. «Que las decisiones no las tomen unos pocos en unos despachos sino que se tomen en sociedad, que los pactos sean transparentes y compartidos», ha argumentado. Igualmente, ha sostenido la necesidad de contar con nuevos mecanismos para proteger el territorio. «Nos tenemos que poner límites», ha añadido.
Más autogobierno
La expresidenta del Govern se ha mostrado igualmente partidaria de más cuotas de autogobierno para Baleares y del avance del Estado hacia el federalismo, entendido como «unión en la diversidad y reconocimiento de la pluralidad». En este sentido, ha reivindicado un Estado «integrador, comprensivo, que abraza la diversidad» frente a la España «que impone una idea única, intolerante y excluyente, que no acepta al diferente, que tiene miedo a reconocer al diferente, que no quiere avanzar en autogobierno o que incluso quiere retroceder». Armengol se ha referido de este modo al uso de las lenguas cooficiales en el Congreso y ha argumentando que favoreciendo que los diputados se expresen en su lengua se acerca la ciudadanía a las instituciones.
La líder socialista ha sido presentada por el expresidente del Govern Francesc Antich que ha coincidido con Armengol en la necesidad de alcanzar un gran pacto social. Sobre cómo conseguir que la derecha se sume a este pacto, el expresidente ha asegurado que «no pierde la esperanza» de que la derecha española, ahora «chantajeada por la extrema derecha» sea un poco más europea. Sobre esto, Armengol ha instado a los socialistas a seguir proponiendo mejoras «porque las batallas que no se presentan no se ganan». La presidenta del Congreso de los Diputados ha recordado, en relación al contexto en el que nació el Estatut d'Autonomia de 1983, que el pacto que dio lugar al Estado de las Autonomías surgió como respuesta a las realidades vasca y catalana y que dotar a Euskadi y Cataluña en aquel momento de autogobierno propició para el resto mecanismos para igualmente desarrollarse en este sentido. «Negar esto es negar la Constitución», ha apuntado. De este modo, ha defendido, en el actual contexto, que seguir avanzando en el reconocimiento de la diversidad permitirá mejorar la estabilidad del conjunto de España y será una oportunidad para consolidar el autogobierno de Baleares.