Michael Schwarz, Fabian Roschig y Sebastian Kroth son tres alemanes afincados en Mallorca que han ideado una bebida revolucionaria y sostenible: un refresco que cualquier persona puede crear desde sus hogares a partir de agua del grifo. Su start-up FUNQ, con sede en Palma, ha sido una de las dos empresas españolas que han sido seleccionadas en la segunda edición del programa Amazon Sustainability Accelerator (la aceleradora de sostenibilidad de Amazon), que premia la innovación y el compromiso con el medioambiente.
Su experiencia en sectores como Coca-Cola (los tres) les ha llevado a pensar que las bebidas embotelladas «están en cualquier esquina y tienen un impacto climático significativo. Una persona de Europa consume hasta 180 botellas de plástico al año. Desde Mallorca, ese impacto también lo percibimos en las playas o en la calle», explica Fabian. De esta forma, pensaron en cómo podrían contribuir con un refresco de «calidad, natural y sostenible».
El refresco que han elaborado está hecho a base de concentrado natural, con vitaminas y minerales. Ese concentrado lo venden en tetrabrik en cinco sabores distinto. El comprador, desde su hogar, simplemente tiene que mezclar el concentrado en agua y así crear una bebida refrescante. «Lo interesante es que el brick es de 500 mililitros y al mezclarlo con agua se consiguen 3,5 litros de refresco. Es decir, la persona ahorra hasta seis botellas de plástico y reduce el envase un 85 %», detalla Fabian Roschig.
Esta idea de refresco comenzó hace aproximadamente un año y no solo han estudiado el mercado y qué productos ecológicos y veganos podrían ofrecer para que la bebida no perdiera el sabor, sino que además empezaron a trabajar con "los mejores cocteleros del mundo, como Ryan Chetiyawardana, el dueño del exclusivo bar Dandelyan de Londres". En cuanto al azúcar, Michael y Fabian aseguran que estas bebidas suyas "solo tiene un tercio de azúcar y calorías" en comparación a cualquier otro refresco del mercado.
Eligieron Mallorca como base central de su empresa porque es aquí donde viven desde hace más de 10 años en el caso de Fabian. En las próximas semanas empezarán a lanzar el producto a varios países europeos, pero en la Isla contarán con un punto de venta local. «La idea es que podamos cerrar acuerdos con empresas locales», consideran Michael y Fabian durante esta entrevista por videoconferencia.
El talento empresarial de Mallorca
Una de las reflexiones que comparten es que no entienden «por qué Mallorca está tan subestimada con el tema de los negocios si hay cantidad de oportunidades como cualquier empresa de Madrid o Barcelona. En la Isla hay mucho potencial de talento y hay muchas posibilidades de atraer a gente a trabajar aquí o a construir su empresa».
Por ello, no dudaron en emplazar su marca en Palma y que tuviera una línea muy comprometida con el medioambiente y la sostenibilidad. De hecho, el programa de Amazon concluye en un informe que la sostenibilidad ayuda a la start-up a incrementar hasta en un 17 % su valoración por parte de inversores. Fabian Roschig reconoce que es así: «Teníamos muy claro este impacto al ver las estadísticas y el tipo de consumidores porque así es ahora mismo la tendencia del mercado. La generación Z, la que entra en el mundo empresarial, llegan con la intención de no trabajar en compañías que no cuenten con valores o compromisos sobre el medioambiente».
La start-up de Mallorca ha competido con más de 1.500 empresas a nivel europeo y solo 16 han sido seleccionadas. El premio que ofrece Amazon incluye formación durante doce semanas sobre los desafíos y cómo escalar con un negocio. También les subvencionan con 12.000 euros y podrán contar con créditos por valor de 25.000 dólares. Es la primera vez desde la creación de este programa que dos empresas españolas salen seleccionadas.