Alrededor de 150 funcionarios han reclamado este sábado el plus de insularidad ante el Consolat de la Mar. Esta protesta se ha repetido en el resto de las Islas, donde se han concentrado en total 300 manifestantes, todos ellos armados con plátanos de plástico para reclamar el mismo plus que el de Canarias. Los sindicatos agrupados en UNISEP, la Plataforma por la Igualdad de los Servicios Públicos, han denunciado casos de «profesores que ahora se tienen que ir a dormir a sus coches porque les echan del piso para dedicarlo al alquiler turístico. En algunos casos les reclaman desde abril o mayo 1.000 euros a la semana o 4.900 euros solo por el mes de junio», en el que aún tienen que seguir impartiendo clases.
Víctor Villatoro, presidente del sindicato de docentes ANPE, denunció que «esta situación se da en junio y septiembre». El problema se repite en el caso de médicos o policías, especialmente en el caso de Eivissa y Formentera.
Los funcionarios reunidos este sábado reclaman al Govern un plus de insularidad como el de Canarias para hacer frente al sobrecoste insular, que alcanza los 600 euros, frente a los 100 que se perciben en Balears. Y todo esto, denuncian, mientras en el Archipiélago canario la vivienda es mucho más barata que aquí. Los sindicatos de las fuerzas de seguridad mostraron su desolación «por el incremento de criminalidad que conllevará el periodo estival y la falta de policías nacionales y guardias civiles en Balears».
Por otro lado, los sindicatos sanitarios Simebal, Satse y Usae advirtieron de «la dificultad de cubrir plazas y la fuga de profesionales en las islas menores». En el caso de los funcionarios de la administración general, CSIF recordó que la continua pérdida de estos trabajadores por la carestía de la vida conlleva «a un déficit de los servicios públicos para los ciudadanos de las Islas».