Los pavos y patos criados en Mallorca serán los grandes ausentes en los menús de Navidad estas fiestas. Salut Pública ha prohibido al único matadero de aves de la Isla (el de Inca) sacrificar estas especies animales. Ante el creciente malestar de los payeses los veterinarios responsables de este metadero explican las razones que avalan la suspensión de esta actividad.
Recuerdan que la normativa europea sobre la protección de los animales en el momento del sacrificio obliga a que los animales sean aturdidos y permanezcan en un estado de inconsciencia para que, de esta manera, no sufran durante su sacrificio. «Actualmente, el matadero de aves de Inca no dispone de la tecnología y procedimientos que eviten el sufrimiento de los pavos y patos en el momento de su sacrificio. Este es el motivo por el que, en tanto en cuanto no se resuelva el problema, no se autoriza el sacrificio de las especies mencionadas», dicen.
Sostienen que «los consumidores pueden seguir comprando y consumiendo patos y pavos, pero sacrificados en otros mataderos». Lo cierto es que todos los patos y pavos que se consuman estos días se tendrán que matar fuera de Baleares, de ahí que los distribuidores estén teniendo algunos problemas. La prohibición de sacrificarlos en Inca coincide con la epidemia de gripe aviar que ha obligado a sacrificar multitud de patos en Francia (principal país exportador) que no ha podido comercializarlos.
Los veterinarios que realizan el control oficial en los mataderos son los responsables de controlar que se evite o minimice el sufrimiento de los animales en todo momento, así como velar por la salud de los consumidores. «En el momento en que las instalaciones reúnan las condiciones adecuadas, los veterinarios autorizarán la matanza de dichas especies y podrá reanudarse esta actividad», informa la Conselleria de Salut.