Varias empresas de Mallorca, en especial dedicadas a la hostelería, han sido víctimas de una macroestafa en la que un grupo organizado suplantaba a la compañía de la luz para exigir cobros de facturas. En total, la Policía Nacional calcula que hay más de un millar de afectados en toda España, de los que apenas un centenar han presentado denuncias. Un grupo de estos denunciantes son locales mallorquines.
La trama fue descubierta hace algo más de un año tras las primeras denuncias en la Península. Más tarde se produjeron las que afectan a las Islas, que se han acumulado a la investigación, cuya parte central se lleva a cabo por un juzgado de Mérida, aunque quedan atestados abiertos en otras provincias.
El relato de los denunciantes es similar: recibían una llamada de quien decía ser su compañía eléctrica con la exigencia del pago de una factura que supuestamente se adeudaba. Se acompañaba con la amenaza de que, si el abono no era inmediato, cortarían el suministro en el acto, con el local abierto. El pago debía efectuarse, bien por una transferencia, bien por tarjeta de crédito o por ingreso en el cajero.
Las víctimas, intimidadas, no comprobaban por otra vía la supuesta deuda. El dinero apenas estaba unos minutos en la cuenta corriente. En cuanto entraba era retirado en efectivo por los miembros de la trama. Las víctimas llegaron a pagar cantidades superiores a los 3.000 euros. La investigación busca más afectados por el delito, que la Policía Nacional estima en que pueden rondar el millar en toda España, dada la actividad que desarrollaba este grupo.
Otro de los extremos que se intentan aclarar en la investigación es si la organización que llevaba a cabo las estafas contaba con cómplices en cada una de las localidades donde se han denunciado las estafas. La red estaba formada al menos por 21 personas distintas que operaban de forma centralizada desde Madrid. A través de pinchazos telefónicos y vigilancias se descubrieron varias decenas de estafas más que se añadieron al medio centenar denunciado de forma inicial.
El apunte
Suplantaciones por teléfono o la red
Las suplantaciones de proveedores y las facturas falsas se han convertido en una de las estafas más habituales a empresas, ya sea de forma telefónica o, de manera más habitual, a través de internet. Los delincuentes roban los datos de un proveedor para girar facturas simuladas a las víctimas. También han sido habituales los falsos comerciales de eléctricas.