El portavoz del Govern, Iago Negueruela, se mostró convencido de que la crisis política de la izquierda en Menorca con la salida del Més per Menorca (MxM) del gobierno insular no tendrá consecuencias en el Ejecutivo balear. MxM tiene dos diputados en el Parlament que permiten a Francina Armengol gobernar con una holgada mayoría.
Si pierde estos apoyos, Armengol quedaría con 30 diputados en la Cámara, lo que supone mantener la mayoría absoluta, pero con un margen de maniobra mucho más ajustado. «El Govern tiene la estabilidad garantizada y eso es importante», ha dicho el Negueruela, que además ha enfatizado en que, en momentos como los actuales, el Govern busca «dar certezas y aprobar normativas importantes para salir de un entorno complejo como la guerra de Ucrania».
El portavoz ha señalado que todo el Ejecutivo apoya la decisión de la presidenta del Consell de Menorca, la socialista Susanna Mora, de aplazar el pleno en el que debía aprobarse la proposición de ley de reserva de la biosfera de Menorca. Este aplazamiento es el que ha motivado la ruptura del acuerdo: los socialistas argumentan que hay informes que sostienen que la ley invade competencias que no son propias mientras que MxM denuncia «chantaje» e imposición del Govern de Francina Armengol para cercenar la propuesta.
A pesar de que Negueruela ha señalado que todos los partidos del Govern apoyan el retraso en la aprobación de la ley para darle validez jurídica, el coordinador de Més, Lluís Apesteguia, ha opinado en su cuenta de Twitter y ha considerado que MxM es imprescindible para construir «el país que queremos». Ha mostrado todo el apoyo a Més per Menorca por su «difícil decisión» de salir del gobierno insular y ha señalado que es una «muestra de coherencia y compromiso con Menorca y su gente».
La realidad es que buena parte del conflicto que ha provocado la ruptura está relacionada con el hecho de que la proposición que debía aprobar el Consell para que se tramite en el Parlament invade competencias del Gobierno, pero también del Govern, especialmente en materia de medio ambiente, un área que precisamente está gestionada por Més, socio mallorquín de MxM.
Negueruela ha insistido en que el Govern tiene la voluntad de aprobar la ley que presente el Consell «con todas las garantías jurídicas». El conseller ha evitado responder a la acusaciones de «chantaje» por parte de MxM y se ha limitado a señalar que los consellers Mercedes Garrido (PSIB) y Miquel Mir (Més) explicaron la postura del Govern y plantearon observaciones jurídicas al texto.
«En el marco institucional del Consorcio de Reserva de la Biosfera, todas las instituciones planteamos cómo nos afecta el texto y el Govern había alertado de forma previa sobre este asunto para evitar problemas futuros legales»; ha añadido Negueruela.
El conseller ha pedido a MxM que reconsidere su decisión y vuelva al gobierno insular «porque es el momento de sumar». «Siempre hemos trabajado desde la lealtad y el respeto a las normas con un partido que siempre ha demostrado una gran responsabilidad. Es importante que vuelva», ha dicho.