El catamarán de pasajeros más moderno del mundo y primero propulsado por gas licuado se estrena este fin de semana en Baleares. Destinado a la línea Palma-Ibiza-Dènia, inaugura una nueva etapa en la historia de las comunicaciones marítimas entre el Archipiélago y la Península.
Este buque recupera la alta velocidad en clave ecológica, viendo incrementada a su vez la capacidad de pasaje y carga, que asciende a 1.200 pasajeros y 450 turismos. Asimismo, representa un motivo de orgullo para los astilleros nacionales, al haber sido botado en las gradas de Armon en Gijón, con la participación en el proyecto de la firma valenciana Cotenaval junto a la australiana Incat, en diseño.
El revolucionario navío, construido enteramente en aluminio con una inversión de 90 millones, llegará en la noche de este sábado por vez primera a Palma desde Ibiza, hacia donde zarpará a primera hora del domingo.
Con 128 metros, es el buque de este tipo de mayor eslora y ofrece unas instalaciones más amplias y adaptadas a la crisis sanitaria, decoradas por Oliver Design. Con una potencia de 8.800 kw, navega a una velocidad de 35 nudos pudiendo alcanzar los 40 de máxima, con lo que el trayecto entre Mallorca e Ibiza se reduce a menos de tres horas.
Como novedad, durante toda la travesía, el pasaje contará con una conexión permanente a Internet y la tarjeta de embarque y acomodación también podrá gestionarse on line.