Mallorca, en riesgo bajo de contagios

Mallorca también está ya en riesgo bajo de contagios de COVID-19 y la única isla de Baleares que queda en riesgo medio es Ibiza; el nivel de riesgo del conjunto de Baleares también es bajo; su incidencia acumulada a 14 días es de 46,72.

La incidencia acumulada de Mallorca es de 47,99 casos positivos de coronavirus por cada 100.000 habitantes; la de Menorca, de 8,57 (ya está en la 'nueva normalidad'); la de Ibiza es de 52,06; Formentera lleva más de 14 día sin contagios.

Cabe destacar que las infecciones se han reducido de forma significativa en Manacor, que este miércoles preocupaba a Salut; su incidencia acumulada a 14 días es de 66,2 casos positivos por cada 100.000 habitantes. Todo indica que seguirá bajando, ya que su incidencia acumulada a siete días es de 15,98.

Más del 40 % de los municipios llevan más de dos semanas sin contagios

La situación epidemiológica de la Isla es bastante buena y el 41,5 % de los municipios llevan más de dos semanas sin contagios. El pasado jueves sólo siete municipios notificaron casos positivos. Al final de esta noticia puede consultar una tabla completa del nivel de riesgo, la incidencia acumulada 14 días y los contagios del jueves por municipios.

Sin embargo, Son Servera sigue en riesgo alto de contagios, ya que su incidencia acumulada a 14 días es de 181,54 casos positivos por cada 100.000 habitantes. También tienen incidencias acumuladas por encima de 100 Lloseta y Campos, aunque al estar por debajo de 150 el riesgo es medio. El 24,5 % de los municipios de la Isla siguen en esta situación; Palma es uno de ellos, aunque está cerca de pasar al riesgo bajo.

Desescalada lenta

El especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, Joan Carles March, califica estos datos de «excelentes». No obstante, insiste en que «es fundamental mantener y no tirar por la borda el gran esfuerzo hecho». En este sentido, considera que «es básico ir bajando poco a poco las restricciones, de una en una y evaluando el cambio generado», así como «incrementar el ritmo de vacunación, dado su efecto en disminuir de forma muy importante las muertes y los casos graves, además de los casos en residencias y las hospitalizaciones».

Por ello, anima a «no bajar la guardia a cada uno de los ciudadanos, manteniendo los criterios tenidos en cuenta hasta ahora. La clave es conseguir un COVID cero que nos permita no jugar al yoyo que sube y baja en función de las medidas».