El IB-Salut puede obligar a médicos y enfermeras a hacer guardias si es necesario para hacer frente a la pandemia de la COVID-19. Así lo prevé el artículo del estatuto marco del personal sanitario de los servicios de salud.
Desde Salut han argumentado que hay muchos profesionales sanitarios confinados. «La gravedad de la situación hace que todo el personal sanitario, independientemente de su categoría, tenga que estar activo y pueda hacer guardias».
No obstante, desde el IB-Salut han precisado que hasta el momento no han tenido que obligar a nadie porque todo el mundo ha respondido. Además, han insistido que antes de este hay otras medidas como contratar a más personal.
Además, este lunes se ha aprobado una disposición adicional, que prevé que, con carácter excepcional, que todo el personal del Servei de Salut, con independencia de su vinculación jurídica y de su categoría profesional, puede realizar guardias propias de su titulación académica, para garantizar la atención permanente y continuada.
Desde el IB-Salut han explicado que la disposición adicional va dirigida al personal que ocupa un puesto diferente y no puede cobrar las guardias. A partir de ahora sí podrá hacerlo. Por citar un ejemplo, un director médico que por necesidades del servicio tiene que hacer una guardia, con esta disposición ya la podrá percibir. Además, han recordado que el artículo 59 del estatuto marco del personal sanitario de los servicios de salud, ya establece que los periodos de descanso y turnos se pueden modificar según las necesidades asistenciales.
De este modo, cada gerencia de los centros hospitalarios puede organizar las guardias extraordinarias que se precisan por causa de especial necesidad, a fin de garantizar la continuidad asistencial.
La retribución por el concepto de guardias con carácter excepcional se hará con cargo a los importes del complemento de atención continuada, de la categoría o especialidad profesional de personal estatutario que tiene atribuida estas funciones, y la retribución no debe suponer ningún incremento respecto de la cuantía que perciben los profesionales que cubren las guardias con carácter ordinario.
Además, el estado de alarma y la normativa derivada del mismo permite contratar a más personal (ya se han contratado más de 800 trabajadores), doblar turnos, así como suspender permisos y vacaciones.