Patronales y sindicatos mostraron este viernes su apoyo a las nuevas restricciones si bien reclamaron un plan de ayudas con el fin de evitar la destrucción del ya golpeado tejido productivo balear, aunque las sectoriales se mostraron escépticos sobre la efectividad de las medidas.
El presidente de PIMEM, Jordi Mora, reivindicó un paquete de ayudas directas de entre 300 y 500 millones para la supervivencia de los pequeños y medianos empresarios más afectados. Además, reclamó que se articule de forma inmediata, en el primer trimestre del año. También la presidenta de la CAEB, Carmen Planas, reclamó ayudas para las empresas. Valoró la prórroga de los expedientes de regulación de empleo (ERTE), si bien «no es suficiente». Insistió en su petición de una rebaja de la carga fiscal por parte de todas las administraciones. Con el fin de tratar estas cuestiones, en la reunión de ayer ya se anunció a los agentes sociales y económicos que a partir de la próxima semana se convocarán nuevos encuentros para abordar nuevas ayudas. «Necesitamos una hoja de ruta para salvar la situación económica y laboral de Balears», manifestó el secretario general de CCOO, José Luis García. Al igual que su homólogo en UGT, Alejandro Texías, apoyaron las nuevas restricciones, la prórroga de los ERTE, y un plan para reactivar la economía.
Patronales y sindicatos coincidieron en señalar la «dureza» del momento actual, tanto por la situación epidemiológica, económica, laboral y, sobre todo, por las incertidumbres sobre la tan anhelada recuperación.
Las sectoriales de restauración y comercio, por su parte, pusieron en tela de juicio algunas de las medidas «ya que si bien se ponen en marcha para evitar contagios, suponen la liquidación de cientos de empresas. Estimamos que cerrarán de forma definitiva el 40 % de restaurantes de Mallorca», afirmó ayer el presidente de Restauración-CAEB, Alfonso Robledo.
Añadió que «no nos pueden mantener en vilo con tantos cambios y exigimos al Govern que sea más consecuente y nos diga la verdad sobre la duración de las nuevas medidas. Además, con ello se demuestra que el foco del contagio no es la restauración tras llevar 15 días nuestro sector cumpliendo a rajatabla todas las restricciones que nos ha impuesto Salut».
PIMEM Restauración puntualizó que «hemos pedido ayudas económicas concretas para salvar parte del tejido empresarial vinculado a la restauración y al turismo», apuntó ayer su vicepresidente, Helmut Clemens.
La patronal de las grandes superficies ANGED mostró ayer disconformidad por el modo en que se van a arbitrar las nuevas medidas. «No entendemos muy bien la diferencia que hace el Govern entre medidas y grandes superficies con más de 700 metros cuadrados. Consideramos que las restricciones tienen que ser generalizadas. Además, en las grandes superficies se pueden cumplir mejor los aforos porque tienen mayores dimensiones», señaló David Gracia.