El Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB) ha desestimado íntegramente el recurso contencioso administrativo interpuesto por la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) contra el acuerdo de suspensión de licencias derivado de la aprobación inicial del Plan Director Sectorial de Equipamientos Comerciales de Mallorca (PECMA).
Así lo ha comunicado este lunes el Consell en una nota de prensa, en la que indica que la sentencia del TSJIB, notificada el 23 de noviembre de 2020, da la razón al Consell, «ya que afirma que la decisión de la institución insular se ajusta a derecho y se despliega correctamente, motivada por la previsión de la legislación en materia de ordenación territorial».
Según el Consell, el TSJIB también reconoce que es una obligación de la administración adoptar este régimen para asegurar la integridad de la propuesta de ordenación en tramitación. Además, destaca el hecho de que el acuerdo adoptado y el régimen cautelar previsto en los artículos 10 y 13.4 de la Ley 4/2000, de ordenación territorial, «es materia estrictamente de ordenación del territorio sin afectar principios económicos, de unidad de mercado o de libre competencia», han indicado desde la institución insular.
«Esta sentencia del TSJIB refuerza lo que siempre ha defendido la institución sobre la suspensión de licencias en el ámbito de la ordenación del territorio y del urbanismo. Es un mecanismo preventivo para evitar alterar las condiciones preexistentes», ha señalado la consellera de Territorio, María Antonia Garcías. En este sentido, ha afirmado que la suspensión temporal es la forma «de asegurar la efectividad de la futura planificación, impidiendo que se puedan producir desarrollos contradictorios y garantizar así la viabilidad del nuevo plan».
El pleno del Consell de Mallorca aprobó de manera definitiva el plan director de equipamientos comerciales (PECMA) el pasado mes de abril de 2019. De acuerdo con la institución, este plan, que establece los requisitos para implantar nuevas grandes superficies comerciales en la isla, está pensado para evitar el impacto medioambiental y también para potenciar los comercios de proximidad.
El PECMA establece diferentes dimensiones para construir nuevos centros comerciales en función del territorio. Así en Palma y en la zona de Marratxí, el máximo es de 40.000 metros cuadrados, mientras que en Inca y Manacor el límite se ha fijado en 13.000. En Palmanova, Santa Ponça, Puerto de Alcudia o la bahía de Palma no deben superar los 4.000 metros cuadrados.
En municipios como Andratx, Pollença, Campos o Sóller, autoriza la construcción de nuevos comercios de 1.500 metros como máximo y en el resto de Mallorca, el límite se ha fijado en superficies de 700 metros cuadrados como máximo.