El PSIB, que ha alcanzado en esta legislatura la mayor presencia institucional de toda de su historia, ha puesto en marcha un proceso de renovación total de su sistema de organización y se ha embarcado en un proceso de reflexión –iniciado durante la pandemia– que concluirá en los próximos meses con un diagnóstico de cómo encarar un horizonte futuro de la Islas que no estaba previsto cuando en las elecciones autonómicas de 2019 enlazó dos etapas de gobierno.
El Consell Polític del PSIB, máximo órgano del partido entre congresos, se reúne este sábado para poner en marcha todo este proceso, analizar el momento político del partido, el cumplimiento de los Acords de Bellver, cómo encarar el próximo curso después de la aprobación ayer de los Presupuestos y acometer cambios internos, que no afectarán a las secretarías ejecutivas pero sí al modo en que se relacionará con la militancia. La cifra de militantes y simpatizantes ronda las 5.000 personas en Baleares. Aproximadamente 2.100 son militantes que pagan cuotas.
Doble objetivo
La reunión básicamente telemática aunque el núcleo duro del partido, que coincide con el de la parte socialista del Govern, estará en la sede de la calle Miracle.
Hay prevista una intervención de la secretaria general y presidenta del Govern, Francina Armengol, que equivaldrá al resumen anual que se reservaba para la cena de final de año que la situación sanitaria ha obligado a suspender. El Consell Polític votará el informe de gestión de la Ejecutiva y la secretaria de Organización, Silvana González, dará cuenta de algunas medidas. «Un partido moderno, activo y adaptado a la situación», será el eje.
El partido prevé reforzar su estructura interna y creará de hecho una nueva agrupación. En realidad, y según la experiencia de los meses de pandemia, será algo parecido a una agrupación virtual. Los socialistas, según el informe que examinará el Consell Polític trabajará, desde ahora, en un doble objetivo: maquinaria engrasada para «continuar con el cambio» y culminar una suerte de ‘hoja de ruta' para los próximos años que han llamado ‘Horizontes de futuro'. Desde el PSIB, y a la espera de debates específicos, se indica que «está claro que nada puede abordarse sin la nueva situación que ha dejado la pandemia».