La combinación de día desapacible, pandemia y muchos trabajadores de las Islas en ERTE, hizo que el primer domingo prenavideño de apertura comercial se saldara con pocos establecimientos abiertos, menos gente en las calles y compras a medio gas, a pesar de que este domingo aún seguían las ofertas del Black Friday.
Más allá de las grandes franquicias, que abrieron durante todo el día, muchos comercios del centro de Palma permanecieron cerrados y en los centros comerciales se vio poca gente por la mañana, aunque a lo largo de la tarde estuvieron algo más concurridos.
Precisamente el presidente de Pimeco, Toni Fuster, se refirió a estos centros comerciales y explicó que pocos pequeños comercios se sumaron a la apertura porque la gente prefiere acercarse a los grandes centros de la periferia de la ciudad. Fuster reconoció que existe cierta preocupación ante la campaña de Navidad «porque la gente tiene poco dinero en el bolsillo» en este momento tan complicado.
También pidió al Ajuntament de Palma que facilite la movilidad dentro de la ciudad para que los compradores de la Part Forana se acerquen hasta Palma.