La Junta de Personal Docente no Universitario de Mallorca considera que el refuerzo de 458 profesores anunciado por el Govern es «totalmente insuficiente» para iniciar el curso con garantías sanitarias frente a la pandemia de coronavirus.
Este órgano, que integra a todos los sindicatos representativos del sector de la enseñanza, exige a la Conselleria de Educación los recursos mínimos para cumplir con las condiciones establecidas en el «escenario B», que prevé comenzar las clases de manera presencial en todos los cursos hasta segundo de ESO y combinar la enseñanza en las aulas con clases telemáticas en el final de Secundaria y el Bachillerato.
La previsión de Educación es que la ratio máxima sea de 20 alumnos por clase, condición para la que «no se dan los requisitos mínimos», ha indicado en rueda de prensa la secretaria de la Junta, Catalina Bibiloni.
«Las cuotas de profesores fueron calculadas en el mes de junio con unas ratios distintas de las que se recomiendan ahora», ha criticado Bibiloni, que ha subrayado que al reducir el máximo de niños por aula a 20 «se multiplican los grupos» y sería preciso disponer de más profesores.
Pere Pol, del STEI, sindicato mayoritario en el sector, ha detallado que «como mínimo» habría que contratar tantos nuevos profesores de Secundaria como sean precisos para garantizar un máximo de 18 horas lectivas semanales por docente, y en Infantil y Primaria un maestro más por cada línea.
El representante sindical ha preferido no dar una cifra total de docentes necesarios para dejar margen a la negociación, mientras que su compañero de UGT Tino Davia ha señalado que su organización mantiene que serían precisos 1.000 profesores nuevos, por lo que hacen falta 500 más de los anunciados por el Govern.
Tampoco ha querido Pol adelantar qué medidas de presión impusarán los sindicatos si la Conselleria no atiende sus reivindicaciones porque, ha dicho, en todo caso intentarán actuar de forma coordinada el resto de la comunidad educativa.
«Sabemos que es importante para las familias y para la sociedad que haya un comienzo de curso en condiciones», ha incidido el representante en la Junta, quien ha advertido, no obstante, que «si se tienen que adoptar medidas de movilización, se adoptarán».
En este sentido, Josep Palou, de Unió Obrera Balear, ha recordado que su organización tiene convocadas concentraciones de protesta contra la política educativa del Govern en todas las islas el 2 de septiembre y una huelga el día 14.
Además de las críticas a la insuficiente dotación de personal para afrontar los cambios que impone la covid-19 a la educación, en las que incluyen también la falta de medios tecnológicos y la precariedad de las instalaciones, la Junta de Personal Docente no Universitario de Mallorca ha censurado la falta de diálogo de la Conselleria.
«En una rueda de prensa se ha presentado la documentación que se debía negociar en la mesa sectoral del lunes con los representantes legales de los trabajadores», ha reprochado la secretaria del organismo.
Los sindicatos han iniciado una recogida de firmas para que toda la comunidad educativa pueda expresar a la Conselleria la demanda de mejora de recursos para que el curso 2020-2021 comience con seguridad sanitaria.