Un diputado del Parlamento Federal Alemán, Christoph Ploss, ha reivindicado que el país prohíba los viajes turísticos a Mallorca, en lugar de limitarse a realizar una recomendación y pruebas PCR.
Así lo ha manifestado en una entrevista con el diario 'Bild' el diputado, de Unión Demócrata Cristiana (CDU, el partido al que pertenece la canciller Angela Merkel, mayoritario en la Cámara).
Las autoridades de Alemania concluyeron el pasado viernes que toda España, con la única excepción de las Islas Canarias, es una «zona de riesgo» por contagios del nuevo coronavirus, por lo que quienes regresen deberán someterse a una prueba y podrían quedar sujetos a cuarentena, en función de lo que decidan los gobiernos regionales.
Sin embargo, Ploss -miembro de los Comités de Transportes y de Asuntos Europeos en el 'Bundestag'- considera que estas medidas no son suficientes y que los viajes a Mallorca, el destino favorito de los alemanes, «deberían prohibirse» a la vista del creciente número de contagios.
El diputado ha defendido que se debe impedir que tengan que cerrar «escuelas y negocios» porque muchos alemanes viajen a áreas de riesgo.
El mercado alemán es, junto al de Reino Unido, uno de los principales clientes del turismo balear. En agosto de 2019, estas dos nacionalidades representaban el 54,8 por ciento de los turistas que recibió el archipiélago, según datos del INE.
Según la patronal alemana de agencias de viajes, unos 30.000 turistas germanos tienen comprados viajes organizados a Baleares, la mayoría a Mallorca. A ellos se deben sumar los turistas que viajan sin un operador turístico.
La decisión de Alemania de incluir Baleares como zona de riesgo ha derivado ya en cancelaciones y ha disparado la preocupación en el tejido económico balear. Desde el Govern esperan que Alemania «dé marcha atrás lo antes posible».