Unas mil personas -ochocientas, según la Policía Nacional- se han concentrado este domingo en la Plaça del Mercat de l'Olivar de Palma para protestar contra el racismo y denunciar la muerte de George Floyd, el ciudadano afroamericano asesinado por la policía de Mineápolis (Estados Unidos) el pasado 25 de mayo.
La concentración, que fue organizada por la recién creada plataforma de la Comunidad Negra Africana y Afrodescendiente en Mallorca, fue seguida en su mayoría por gente joven en un ambiente de intensa protesta y denuncia.
Durante la concentración se censuraron las políticas racistas y el abuso policial. ‘El racismo es una pandemia', ‘Black lives matter' ('Las vidas negras importan') o ‘No a los CIEs' fueron algunas de las proclamas más pronunciadas por los participantes, muchos de ellos de países africanos o segundas generaciones.
Guillem Balboa, exalcalde de Alaró por Més y coportavoz de la entidad convocante, se dirigió al millar de personas para clamar que «esto es un acto de reafirmación, de dignidad y de sanación tras siglos de explotación, de humillación y deshumanización de los pueblos negros, pero no es un acto de victimización ni de resentimiento: somos mucho más que la herida que nos han infringido y que los colores con los que nos han estigmatizado».
Al finalizar las intervenciones, los participantes de la concentración apoyaron la rodilla derecha como crítica hacia el racismo. En otras ciudades de España y del mundo también se llevaron a cabo protestas contra la muerte de George Floyd.