Empresas y particulares de Baleares se han volcado, en la medida de sus posibilidades, en la lucha contra el coronavirus. Negocios que tuvieron que cerrar han donado tanto material sanitario como alimentos a entidades y centros que en estos momentos los necesitan más que nunca. Muchos hoteles y restaurantes de las Islas, que habían comprado alimentos de cara al inicio de la temporada turística, los han donado a entidades que, a su vez, los sirven a la población más vulnerable.
Asimismo, son muchas las empresas que han entregado mascarillas, guantes y lociones alcohólicas, entre otros productos, a centros sanitarios, residencias u otras instituciones que actualmente los necesitan. La solidaridad se ha hecho muy visible en estos momentos.
Los establecimientos asociados a la Federación Hotelera de Mallorca donaron material sanitario a la Direcció General de Salut, que lo distribuyó en función de sus necesidades. Además, se han puesto a disposición de la Administración establecimientos para alojar tanto a pacientes enfermos como a personal sanitario que debe permanecer aislado.
Por su parte, Mercadona ha reforzado su modelo responsable durante la actual situación. La cadena de supermercados ha entregado tres toneladas de productos de primera necesidad al Banco de Alimentos de Mallorca, como pollo relleno, queso, jamón, pechuga de pollo, pechuga de pavo y otros productos de charcutería.
Por otra parte, la compañía reafirma su proceso de donaciones con los comedores sociales y entidades benéficas de Balears con las que colabora habitualmente y ha puesto en marcha nuevas medidas que garantizan tanto la seguridad de las personas como el suministro de estas organizaciones. En concreto, Mercadona colabora con el Banco de Alimentos de Mallorca, Maó y Ciutadella; Càritas de Eivissa y Formentera; y con los comedores sociales Ca l'Ardiaca II, Tardor, Estrellas & Duendes y los que gestiona Càritas en Inca y Eivissa. «Nuestro objetivo es hacer lo que haga falta para dar respuesta a las demandas de las personas más necesitadas», señaló la directora de Relaciones Externas de la cadena en Balears, Bárbara Ordás.
Las entidades sin ánimo de lucro ya constatan un aumento de la demanda, pues miles de trabajadores de las Islas ya han perdido o van a perder su empleo. «Se necesitan muchos más recursos para las personas vulnerables», indicó el presidente del Banco de Alimentos de Mallorca, Raimundo Montis, quien agradeció las ayudas que reciben.