La decisión del Gobierno de cancelar durante un mes los viajes de la tercera edad del Imserso por la crisis del coronavirus, cayó este martes como un jarro de agua fría sobre el sector hotelero de Mallorca, Menorca y Eivissa.
Miles de turistas de la tercera edad dejarán de venir a las Islas durante los próximos treinta días, lo que hará que hoteles que operaban al cien por cien con este segmento vacacional «se vean obligados a cerrar temporalmente sus puertas por no tener clientes», indicaron desde la asociaciones hoteleras de Palmanova-Magaluf y Platja de Palma.
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La decisión será adoptada en los próximos días, una vez finalicen su estancia los turistas del Imserso y puedan ser trasladados a sus comunidades autónomas de origen.
Las zonas más afectadas son Palmanova-Magaluf y Platja de Palma. La medida, decidida de forma urgente por el Gobierno, pilló por sorpresa a hoteleros, aerolíneas, transportistas, patronales y a la empresa adjudicataria de este programa en Baleares y Canarias, Mundo Senior (Turismo Social), cuya centralita estuvo durante todo el día de ayer colapsada por familiares de los turistas del Imserso afectados.
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Las aerolíneas que comercializan este tipo de viajes mostraron su preocupación por el impacto económico que ello les supondrá «porque la imagen negativa que se genera hará que el resto de programa de la tercera edad también se cancele en las Islas».
La patronal del transporte discrecional por carretera, que es la que se encarga de hacer los traslados de los turistas del Imserso del aeropuerto a los hoteleros y las excursiones, calificó la noticia de «auténtico mazazo para nuestro sector, porque las consecuencias son impredecibles. Nunca habíamos vivido una situación de este calado».
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