El Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) aumentó en los nueve primeros meses del año un 0,4 % con 11.595 nuevos afiliados, hasta contabilizar 3.266.258 cotizantes, siendo Baleares donde más creció su número con una subida del 10,2 %.
Según los datos facilitados este domingo por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), se trata, a nivel nacional, de un crecimiento cuatro veces inferior al registrado en el mismo periodo de 2018, cuando el RETA sumó 48.992 afiliados.
Por comunidades autónomas, Baleares es la que más creció hasta septiembre, un 10,2 %; seguida de Andalucía, un 1,8 %, y Canarias, un 1,7 %.
También aumentaron el número de autónomos en la Comunidad Valenciana y Murcia (0,7 %), Extremadura (0,3 %), Cantabria (0,2 %) y la Comunidad de Madrid, que registró un porcentaje plano.
En el otro lado de la tabla, Aragón encabezó los descensos al perder un 2,7 % de autónomos, seguida por La Rioja (1,9 %), País Vasco (1,4 %), Navarra (1,2 %), Asturias (1,1 %), Castilla y León (0,8 %), Galicia y Cataluña (0,4 %) y Castilla-La Mancha (0,2 %).
Si se atiende a los sectores, el número de autónomos dedicados a las actividades artísticas y de entretenimiento aumentó en este periodo un 4,6 % con 3.161 nuevos afiliados y fue el que más creció en tasa interanual, seguido de las actividades inmobiliarias (2.084 trabajadores, un 4,5 % más) y la hostelería (11.171, un 3,5 % más).
En el lado contrario, la industria fue la que más perdió hasta septiembre, con 12.931 empleados menos, lo que representó una caída del 5,5 %; mientras que la educación también se dejó 4.461 autónomos (un 4,9 %), y el comercio retrocedió un 0,6 %, con 4.858 afiliados menos.
ATA también ha destacado que las mujeres representan el 71,8 % de las nuevos autónomos que cotizan en el RETA en 2019.
El presidente de ATA, Lorenzo Amor, ha señalado que este año «se va a crear la mitad del empleo que se creó el año pasado», al tiempo que ha vaticinado «que lo peor para el empleo está por llegar».
En este sentido, ha apuntado que «no se está dando el entorno necesario, la certidumbre ni el clima para favorecer el emprendimiento y la creación de empleo», y ha agregado que «el panorama socioeconómico está pasando factura al empleo».