La Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (PIMEM) ha avisado este lunes de que la liquidación de Thomas Cook supone «pérdidas millonarias» en sectores muy vinculados con al turismo como el transporte, la restauración y el comercio.
«Se trata de un golpe durísimo para nuestro sector turístico. Ahora sí, podemos decir claramente que, esta temporada ha sido mala», ha indicado el presidente de la PIMEM, Jordi Mora, en un comunicado.
Por su parte, Juan Manuel Ordinas, presidente de la Associació de Petits Hotels, ha señalado que el nivel de influencia de Thomas Cook en el sector turístico de Baleares es «muy alto» y que su desaparición «será un golpe duro».
Además, según Ordinas también los hoteleros afectados «deberán ver en que posición se encuentran para hacer frente a las deudas de que deja Thomas Cook».
El banco de camas libres en Baleares que deja la quiebra puede producir según el presidente de los hoteleros de PIMEM, «un convulso final de temporada y una disminución drástica de los precios en todos los hoteles afectados. Esperemos que los seguros puedan dar una solución eficaz».
El presidente de PIMECO, Toni Fuster, ha vaticinado que la quiebra del mayorista británico repercutirá en una disminución «importante» del consumo durante el final de la temporada, aunque ha matizado que considera que es pronto para conocer el alcance.
Para la Federación del Transporte de PIMEM, encabezada por Ramón Reus, se percibe el impacto en el taxi, empresas de autobuses, rent a car.
«Económicamente nos afectará. Los precios también deberán disminuir para poder dar salida a estas reservas canceladas» ha señalado. La PIMEM Restauración ha apuntado «ahora es complicado analizar los efectos a los que nos podemos ver expuestos, pero está claro que cualquier movimiento del turismo británico preocupa porque son uno de nuestros principales consumidores».