El Consell de Govern ha aprobado este viernes el decreto que aprueba el Plan Director Sectorial de Movilidad de Baleares 2019-2026, presupuestado con 1.720 millones de euros que, entre otras cuestiones, potenciará la red ferroviaria para desarrollar líneas de Palma a Llucmajor, tren hasta Alcúdia, Artà y Cala Rajada o la integración del metro en la red urbana de Palma.
Así ha informado el conseller de Territorio, Energia y Movilidad, Marc Pons, en una rueda de prensa posterior al Consell de Govern en la que ha estado acompañado de la consellera de Presidencia, Pilar Costa. «Es un plan para garantizar la movilidad a todo el mundo y que plasma la apuesta por la reducción del vehículo privado en favor del transporte público», ha manifestado Pons.
El Plan fija como objetivos principales la accesibilidad al transporte de la ciudadanía en todo el territorio, la reducción de la contaminación y accidentalidad, la transformación del modelo de transporte hacia el transporte público y la flexibilización de las condiciones del transporte público ante la «rigidez» del privado.
Así, se prevé el incremento del 50 por ciento de las concesiones de autobús en Mallorca así como un nuevo mapa ferroviario que plantea desarrollar la línea de Migjorn, de Palma a Llucmajor; la implantación del Trambadia desde Palma hasta el aeropuerto y la integración del metro en la red urbana de Palma, con la ampliación de la línea al ParcBit y al Hospital de Son Espases. Además, se prevé que las líneas de tren lleguen hasta Alcúdia, Artà y Cala Rajada, además de la ampliación de la línea de Migjorn hasta Felanitx o del tranvía hasta Santa Ponça.
Otras de las medidas contempladas en el plan son la creación de hasta 50 kilómetros de carril bus VAO, la habilitación de aparcamientos disuasorios en la periferia de las ciudades o la integración tarifaria de todas las Islas, así como la apuesta por el vehículo eléctrico y por continuar con la electrificación de la red ferroviaria.
En este sentido, el Plan prevé una nueva distribución de los modos de transporte de la población residente y apuesta para que el 13 % de los desplazamientos se realicen en transporte público; un 42 % a pie y un 9 % en bicicleta, lo que reducirá el peso del coche del 56 % al 36 %. En el caso de los turistas, se ha estimado que se pueden reducir en un 30 % los desplazamientos que realizan en coche.
«Es un modelo en el que la utilización del coche privado pierde peso en favor del transporte colectivo», ha asegurado Pons, quien ha añadido que el plan tiene un carácter «social, de integración y de igualdad» para garantizar el «derecho a la movilidad» de la ciudadanía.