Mallorca arroja un déficit de precipitaciones del 60 % entre enero y marzo de este año respecto a los valores normales de este trimestre.
Según explicó Bernat Amengual, responsable del Grupo de Predicción y Vigilancia de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Baleares, «tomamos como valores normales los comprendidos entre 1981 y 2010. Es la etapa de referencia. Así, los datos del período enero-marzo del presente año son un 60 % inferiores a los normales en Mallorca, un 75 % en Pitiüses y un 23 % en Menorca».
Ante estos datos, Amengual señala que «todavía no nos encontramos en un período de sequía. De hecho, no llegamos a los datos de una sequía oficialmente declarada, pero si antes del verano no llueve con cierta normalidad, la situación sí puede convertirse en crítica».
El responsable de la Aemet indica que «el otoño es la estación en la que más llueve en Baleares, seguida del final del invierno y el principio de la primavera, pero en el presente año las precipitaciones de este último período han sido bastante inferiores a los valores normales, no tanto en Menorca, pero sí son significativamente bajas en Mallorca y en las Pitiüses».
Por su parte, Joan Simonet, gerente de Asaja, manifestó este viernes que «la situación actual pinta bastante mal y ya se pueden prever pérdidas en el subsector de cereales, forrajes y leguminosas, principalmente en el sur de Mallorca, donde estas plantas muestran un crecimiento inferior al normal por la falta de agua. En el Pla, cereales y forrajeras están sufriendo y, como mínimo, habrá una mala cosecha. La consecuencia será que los ganaderos se van a ver abocados a efectuar compras de forrajes que, si hubiera llovido con cierta normalidad, no habrían sido necesarias».
En este sentido, las organizaciones agrarias ya han solicitado a la Conselleria d'Agricultura la convocatoria de una Mesa de Sequera para iniciar un seguimiento de la situación, aunque el departamento autonómico todavía no ha dado respuesta.