Este viernes 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, se ha convocado por segunda vez en España una huelga feminista, una jornada en la que se llama a participar tanto a hombres como a mujeres porque las vidas de éstas últimas «siguen marcadas por las desigualdades, por las violencias machistas, por la precariedad y la no corresponsabilidad ni de los hombres ni del Estado en los trabajos de cuidados».
La comisión del 8M anima a sumarse a las cuatro huelgas o a algunas de ellas. ¿Cuáles son? y ¿qué se defiende en cada uno de esos campos de batalla? El Movimiento Feminista de Mallorca las explica:
■ HUELGA LABORAL. ¿Quién ocupa los puestos de trabajo más precarios y mal pagados?, ¿tu salario te permite vivir con dignidad?, ¿por qué las mujeres tenemos que demostrar continuamente que nos merecemos estar donde estamos?, ¿por qué las mujeres, al final de su vida laboral tienen pensiones más bajas?, ¿por qué tenemos que aguantar el acoso y la violencia sexual en el trabajo? Por todo ello, la huelga reivindica, entre otras cosas, acabar con el paro, la precariedad laboral y las condiciones de miseria que se imponen a la mujer, pero también luchar por la eliminación de la brecha laboral o acabar con la doble jornada y eliminar la explotación dentro y fuera de casa.
¿Cómo secundarla? Esta huelga significa no realizar el trabajo asalariado en empresas, comercios, fábricas, servicios públicos de salud, educación cuidados, u otros. El objetivo es que ese día las mujeres «desaparezcan físicamente» todos esos espacios que ocupa y en los que está «invisibilizada».
■ HUELGA DE CONSUMO. ¿Cuántas veces te has preguntado por qué los productos dirigidos a mujeres son más caros?, ¿por qué tenemos que pagar más por ser mujeres?, ¿por qué hay productos de primera necesidad con un 21% de IVA? Por todo ello, la huelga reivindica, entre otros asuntos, acabar con el consumo capitalista construyendo formas de consumo feministas, evitar los comercios que explotan a la mujer, señalar qué marcas aplican las tasa rosa y dejar de consumirlas o que el cuerpo de la mujer deje de ser objeto de consumo.
¿Cómo secundarla? Esta huelga insta a las mujeres en particular a abstenerse de consumir lo que no sea imprescindible en esa jornada, reduciendo al mínimo el gasto en suministros pero también en bienes y servicios. Es una iniciativa de la corriente ecofeminista para reflexionar sobre el peso de las mujeres en el modo de consumir y la fuerza que tienen para implantar modelos más sostenibles.
■ HUELGA DE CUIDADOS. ¿Cuántas horas dedicas a cuidar a otras personas?, ¿cuántas horas dedicas a cuidarte?, ¿quién se encarga de que en casa esté todo preparado?, ¿quién dedica su vida al cuidado o hace doble jornada, la asalariada y la doméstica? Esta huelga persigue, entre otras cuestiones, visibilizar que las mujeres son las que constantemente cuidamos todo y a todos los que giran a nuestro alrededor; visibilizar la importancia de estos trabajos, colectivizar las responsabilidades, denunciar el trabajo de cuidados como una doble explotación del sistema capitalista.
¿Cómo secundarla? Esta huelga persigue que en la esfera doméstica los hombres asuman las tareas del hogar y de los cuidados para que se den cuenta de hasta qué punto la labor de las mujeres es vital para el sostenimiento del hogar y cuánta carga están asumiendo en solitario. No llevar a los niños al colegio, no lavar, tender o planchar, son algunas de las ideas que da la Comisión 8M para ese día.
■ HUELGA ESTUDIANTIL. ¿Cuántas veces has oído comentarios machistas en clase?, ¿cuántas veces te han amonestado por tu forma de vestir?, ¿cuántas veces te han acosado sexualmente ante la indiferencia del profesorado?. Esta huelga reivindica una educación feminista e inclusiva, erradicar la violencia machista de las aulas, el acoso sexual, la homofobia o la transfobia; también luchar contra la exclusión de las mujeres en el estudio de disciplinas educativas o luchar contra el abandono escolar de mujeres que realizan una doble o triple jornada.
¿Cómo secundarla? La comisión del 8M llama a parar en colegios, institutos y universidades porque el sistema educativo es el principal espacio «en el que se reproduce el actual sistema capitalista y patriarcal».