El Parlament balear debatirá en su pleno del próximo martes sobre la política respecto a la violencia machista que propone Vox, un partido sin representación en las instituciones de las islas.
Los grupos de izquierda han incluido en el orden del día una proposición no de ley en la que se plantea el rechazo «a cualquier posicionamiento político que propugne la eliminación o la minoración de las medidas de protección a las mujeres frente a la violencia machista».
La propuesta no hace alusión expresa a Vox, pero se refiere claramente a los planteamientos en materia de violencia de género del partido de extrema derecha y a su apoyo al gobierno del PP y Ciudadanos en Andalucía.
«El Parlament de las Islas Baleares rechaza la adopción de cualquier tipo de acuerdo, explícito o implícito, con formaciones que planteen la supresión o reducción de las medidas de protección a las mujeres, dando así cobertura a políticas irresponsables que comportan un altísimo riesgo de agravar el problema», reza el cuarto punto de la proposición.
El pronunciamiento, que alude en su título a la «puesta en valor de las medidas contempladas en el Pacto de Estado en materia de violencia de género», se aprobará, con toda probabilidad, dada la mayoría que tienen en la cámara los grupos que lo proponen.
De la misma forma que con esta proposición no de ley la izquierda busca criticar las políticas de los grupos de la oposición, el PP intentará poner en evidencia a los que apoyan al Govern con una iniciativa en la que aboga por el rechazo del proyecto de presupuestos del Gobierno central.
En su proposición no de ley, el PP insta al Parlament a censurar unos presupuestos «insolidarios» que «son utilizados como moneda de cambio para comprar voluntades con el único objetivo de mantener las ambiciones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez».
En el segundo punto, el principal grupo opositor pide la retirada del proyecto y la presentación de unas nuevas cuentas que sitúen a Baleares «en la media de las comunidades autónomas» en inversión territorializada, un objetivo coincidente con el que ha expresado la presidenta del Govern, Francina Armengol.
El último punto se refiere a la jefa del ejecutivo para lamentar su «escasa capacidad negociadora y de influencia» y la insta a expresar al presidente Sánchez «el profundo malestar de la comunidad autónoma» por el «agravio» de los presupuestos.
El pleno del martes es el primero del periodo ordinario final de la legislatura, que concluirá cuando se convoquen las elecciones del 26 de mayo.