Las infracciones en el sector del transporte se han disparado este año. Durante la temporada turística alta los inspectores de transportes han detectado 656 infracciones que suman sanciones por un valor de 300.948 euros.
El número de infracciones registradas este año en el aeropuerto de Palma se ha multiplicado por 13 respecto el del año pasado, cuando se impusieron 48 sanciones. De ahí, que el conseller de Mobilitat, Marc Pons, se mostrara satisfecho por los resultados de la campaña de la lucha contra el intrusismo de este año.
Así lo indicó tras presidir la comisión para la lucha contra el intrusismo, en la que se analizaron las cifras de la campaña de este año, que se ha llevado a cabo en colaboración con la Guardia Civil y AENA. Del total de las infracciones, 14 han sido por captación ilegal de clientes, una cifra muy superior a las dos del año pasado. Estas 14 infracciones representan una multa de 14.000 euros y se han podido acreditar gracias al trabajo de los inspectores que han actuado de incógnito.
Su incorporación ha sido una de las novedades de este año, que ha obligado a ampliar con dos trabajadores la plantilla, a la que también se ha sumado un auxiliar. Sin embargo, el director general de Transports, Jaume Mateu, reconoció que esta temporada, sobre todo al principio, «hubo tensiones» lo que, a su juicio, significa que, «por fin, hemos conseguido entrar en el núcleo de la captación ilegal».
Además, este año se ha realizado un control documental de las empresas sancionadas in situ, con lo que se han podido detectar muchas infracciones en cuestiones de contratación y facturación. Los inspectores se han desplazado a Son Sant Joan en las puntas de máxima actividad, lo que incluye fines de semana, «un horario que antes no se cubría», indicó el conseller.