El alcalde de Palma, Antoni Noguera, ha pedido este miércoles a la ministra de Transición ecológica, Teresa Ribera, que agilice la redacción y tramitación del anteproyecto para construir una depuradora nueva en la bahía de Palma, el proyecto de ejecución y las obras, ante la gravedad de los vertidos fecales este verano.
Noguera ha remitido una carta a la ministra describiendo «la gravedad de la situación actual» ante los frecuentes vertidos de aguas mixtas (pluviales y residuales) en el litoral de la bahía de Palma, que se producen «prácticamente en cada episodio de lluvia» y que achaca a las deficiencias de las infraestructuras de depuración y saneamiento.
Las playas de Can Pere Antoni y Ciutat Jardí han sido cerradas al baño ocho veces desde el 7 de agosto por vertidos de aguas fecales.
Noguera explica en la carta que la principal depuradora de la ciudad, la estación depuradora de aguas residuales EDAR Palma II, se construyó en los 70 y se amplió en 1985, pero su tecnología «no permite conseguir los parámetros requeridos actualmente para la calidad del agua y su capacidad no está adaptada al crecimiento que han experimentado la población y el turismo estos últimos años».
Según Noguera, la instalación ha llegado al final de su vida útil, está «físicamente envejecida» y empieza a sufrir problemas estructurales.
Desde que en 1993 se declararon de interés general las obras de saneamiento de la Bahía de Palma, mediante un Real Decreto, el Ayuntamiento ha reclamado reiteradamente al ministerio competente la construcción de una nueva depuradora para sustituir la EDAR II y, según Noguera, hasta 2016 «no se han producido avances significativos».
Si bien el proyecto «se ha desbloqueado» y está en fase de redacción del anteproyecto para la nueva depuradora y el emisario, Noguera reclama a la ministra «la máxima agilidad y premura» por el problema de vertidos que sufre Palma que «este verano ha tenido una mayor repercusión al producirse una situación de lluvias muy frecuentes a partir de la segunda quincena de agosto».
«Esta situación está provocando importantes impactos en el medio ambiente de nuestra bahía, con consecuencias negativas también para la población, el turismo y otras actividades económicas», advierte el alcalde de Palma en la carta, que asegura que los vertidos y cierres de playas están provocando «una intensa polémica y debate social».
Insiste en que la solución pasa por renovar las infraestructuras de saneamiento y reclama «la máxima celeridad posible» en la construcción de la depuradora nueva.
Recuerda además que el ayuntamiento ha realizado proyectos de un nuevo colector interceptor, una estación de bombeo y un depósito de laminación, que está previsto adjudicar en octubre y cuyas obras podrían comenzar este año. Además el consistorio ha adquirido los terrenos necesarios para construir la nueva depuradora.
Noguera finaliza la carta pidiendo una reunión con la ministra para abordar esta cuestión y «otras de igual trascendencia» para el medio ambiente del municipio.