El grupo ecologista GOB ha denunciado la pasividad de la Demarcación de Costas tras el derrumbe de la terraza de un antiguo restaurante ubicado en unos terrenos en Sant Elm, sobre el que pesa una sentencia que obligaba a demoler la edificación y que no ha sido ejecutada.
La concesión de la zona que se ha derrumbado, que tenía permiso para restaurante, terraza y piscina, caducó por sentencia de la Audiencia Nacional en 2013 y fue ratificada por el Tribunal Supremo el 2014, ha apuntado el GOB en una nota de prensa.
En esta sentencia se mencionan una serie de ilegalidades perpetradas por parte de la concesionaria que motivaron la sentencia de caducidad tras la denuncia inicial de la comunidad de propietarios de Porto Drac, en el municipio mallorquín de Andratx.
«Después de casi cuatro años desde la resolución final del Tribunal Superior y cinco después de la sentencia firme de la Audiencia Nacional, Demarcación de Costas sigue sin obligar a los antiguos concesionarios a cumplir con la sentencia», ha denunciado la entidad.
Así, el GOB ha reiterado la necesidad de que Demarcación de Costas obligue a la ejecución de la demolición y recupere estos terrenos del Dominio Público Marítimo-terrestre, tal y como le corresponde.