La plataforma medioambiental Terraferida afirma que la zonificación de plazas turísticas propuesta recientemente por el Consell de Mallorca se ha realizado sin tener en cuenta ningún criterio ambiental, algo que contradice lo previsto por la Ley del Turismo y que constituye una herramienta para seguir incrementando el número de plazas turísticas en las Isla.
«Aunque la zonificación propuesta sea provisional, ya se intuye la dirección de la política turística futura: extender la 'hotelización' de la vivienda y continuar la tendencia de crecimiento de la oferta turística».
Desde este sector remarcan que los planes de intervención en ámbitos turísticos (PIAT) son los «verdaderos instrumentos de ordenación territorial» en este ámbito, y que el estudio de saturación de las zonas ha obviado otros marcadores ambientales de interés.
«La propuesta del Consell además es contradictoria. Por un lado plantea una serie de objetivos territoriales, sociales y ambientales, tales como 'gestión más adecuada de los recursos y las infraestructuras', pero por otro, promueve el crecimiento del sector económico que más presión ejerce» sobre los mismos, afirma Terraferida, asegurando que las plazas legales actuales sumadas a las que se quieren repartir –43.000 en total– superan el techo declarado en su día por las autoridades.
Por todo ello piden que se retire la actual propuesta, realizando otra que aplique los mismos criterios por igual en todas las zonas, que no se conceda ni una plaza turística más a Mallorca, que se elimine la sobreocupación en los establecimientos hoteleros, y no se aporte «ni un euro más» a promoción turística por ser, a su entender, un «gasto innecesario y contraproducente», puesto que «Mallorca tiene más turistas de los que puede y quiere asumir».