La potencia eléctrica instalada en Baleares, sin tener en cuenta ninguno de los cuatro grupos de Es Murterar, es suficiente para cubrir la demanda energética en los próximos cinco años, sin necesidad de incorporar nueva generación. Así se desprende de un informe elaborado por Red Eléctrica –compañía que se encarga de la operación del sistema eléctrico y del transporte de electricidad– a principios de año en el que analiza la cobertura de la demanda en las Islas entre los años 2018 y 2022.
El informe ya no tiene en cuenta los dos grupos de producción más antiguos de Es Murterar porque tienen más de 25 años y han finalizado su vida útil. En cuanto a los otros dos, deja de tenerlos en cuenta a partir de 2020, año en que se aplicará la Directiva de Emisiones Industriales, que es un mecanismo regulatorio medioambiental de la Unión Europea que define las obligaciones que deben respetar las actividades industriales. Asimismo, el informe no incluye la energía proveniente de renovables ya que su implantación todavía se estaba tramitando a la hora de realizar el estudio.
Los cuatro grupos de Es Murterar representan un 21 % de la potencia instalada en las Islas, lo que representa 468 megavatios (MW) de los 2.283 instalados en el sistema eléctrico balear. Sin embargo, casi la mitad de la energía que se consume en las Islas proviene del carbón, que se produce en la central de Alcúdia y como se aprecia en el gráfico adjunto, por ser la energía más barata. Red Eléctrica, además del transporte de la energía, también se encarga de elegir el tipo de energía que proporciona, en base al mejor precio y a la mayor garantía de calidad. Por su parte, los ciclos combinados de gas natural son los que tienen un coste más elevado, pese a que su potencia instalada en las Islas ronda el millar de megavatios.
Precisamente el coste es el principal factor por el que el Gobierno central ha rechazado los planes del Govern de cerrar de forma progresiva Es Murterar.