El presidente de la Agrupación balear del taxi, Antonio Bauzà, ha solicitado este miércoles a las Fuerzas de Seguridad del Estado que refuercen la labor inspectora del Govern, a la que ha expresado el soporte del colectivo, para controlar el intrusismo en el transporte, en especial de viajeros en el Aeropuerto de Palma.
Bauzà ha participado en la comisión de lucha contra el instrusismo en el transporte, que ha presidido el conseller de Territorio, Energía y Movilidad, Marc Pons, donde se ha presentado el plan de lucha contra esta actividad que la semana pasada generó conflictos en Son Sant Joan y la paralización de la actividad por parte de los taxistas.
«Lamentablemente queda demostrado que si no se hacen actuaciones no se consigue nada, hace dos años que estamos reclamando estas medidas», ha apuntado Bauzà en declaraciones a la prensa tras la reunión.
El representante de los taxistas ha asegurado que el colectivo no es partidario de «medidas violentas», como las que se produjeron la semana pasada en el aeropuerto, pero que han sido «fruto de la crispación, de nervios», de que no se ha actuado desde la Administración y de que los trabajadores están perdiendo su trabajo ante la oferta ilegal de captación de clientes.
El pasado viernes el Consell de Govern aprobó un decreto que regula que los taxistas suponen el único transporte discrecional que puede captar clientes en la vía pública.
Tras la comisión de este miércoles, Bauzà ha destacado la mayor implicación por parte de las Fuerzas de Seguridad del Estado que reforzarán la labor inspectora de la Conselleria, y que dejan en evidencia que ésta se queda «corta».
También ha pedido mayor presencia de la Policía Local en el aeropuerto de Palma, ante lo que desde el cuerpo municipal se ha informado de medios limitados, ha indicado.
El objetivo es «disuadir a los posibles defraudadores», ha señalado el presidente de los taxistas baleares, que ha apuntado a la necesidad de coordinación de los inspectores y las fuerzas de Seguridad.
Tras la comisión, Pons ha informado de que se ha acordado que Guardia Civil, Policía Nacional, local y Aena reforzarán el trabajo de los siete inspectores de la Conselleria para controlar la oferta ilegal de transporte, especialmente en el Aeropuerto de Palma y el de Ibiza.