Irán y España quieren fortalecer su colaboración en el sector turismo, con el primer país interesado principalmente en aprender de la experiencia española en este ámbito y de su modelo de gestión del patrimonio histórico.
Estos temas fueron abordados este martes en una reunión en Teherán entre la vicepresidenta y directora de la Organización de Patrimonio Cultural y Turismo de Irán, Zahra Ahmadi; el embajador español en el país, Eduardo López Busquets, y el consejero de Turismo para la región del Golfo, Miguel Nieto-Sandoval.
El embajador explicó que en el encuentro trataron la gestión española de lugares históricos como la Alhambra de Granada y la red de Paradores de Turismo, un conjunto de hoteles de alta categoría localizados en edificios emblemáticos de España.
Irán ha pedido cooperación en este asunto para conocer las «buenas prácticas» españolas en turismo cultural y en la gestión del patrimonio para que tenga «una función social», señaló López Busquets.
Por el momento, el grupo Meliá Hotels International, ha firmado un acuerdo para gestionar con estándares internacionales un hotel en el mar Caspio de propiedad iraní.
La vicepresidenta afirmó por su parte que Irán debe «aprovechar las buenas experiencias de España para cambiar las capacidades turísticas de Irán en oportunidades de hacer dinero», según las declaraciones difundidas por la agencia oficial IRNA.
En concreto, Ahmadi citó el tema de la rehabilitación de edificios históricos y su conversión en «residencias tradicionales».
La República Islámica también está interesada en la inversión española en el sector hotelero, un tema que el embajador consideró «más complejo».
Otro punto para impulsar la cooperación es el inicio de vuelos directos entre España e Irán, que está previsto en junio de este año.
Se trata de un vuelo regular de la aerolínea iraní Mahan Air a Barcelona, y también se trabaja para establecer una línea directa con Madrid, dijo el embajador.
Según un acuerdo de cooperación firmado entre ambos países, se prevé que Mahan Air viaje a España y la española Vueling lo haga a Irán, aunque para esto último no hay fecha.
Los viajeros españoles a Irán han aumentado considerablemente desde la firma del acuerdo nuclear en julio de 2015, mientras que los iraníes tienen un gran interés por viajar a España.
Esto último se ve dificultado por la escasa emisión de visados, otro de los asuntos abordados en la reunión, y sobre el que López Busquets apuntó que «hay dificultades para gestionar la gran cantidad de demandas».
Este encuentro coincide con la Feria Internacional de Turismo de Teherán, que abrió ayer sus puertas con la participación de numerosas empresas del sector nacionales y extranjeras, entre ellas españolas.