Georgi Stoyanov, profesor de nacionalidad búlgara, es el presidente de la comunidad de vecinos del polémico bloque de apartamentos Pullman (calle Juan de Saridakis). Afirma que «he abandonado mi vida para luchar por mi casa».
Asegura que «los indeseables que trafican aquí con drogas o se dedican al negocio de la prostitución acabarán marchándose por sí mismos porque les he denunciado, les denuncio y les denunciaré». Stoyanov no quiere que le fotografíen la cara. «Ya me han pegado dos veces y, francamente, no quiero que me manden tipos violentos para hacerme daño».
Asumió la presidencia de la comunidad el pasado noviembre «por decisión judicial», ya que el anterior presidente no se quería ir y le demandó. «He obtenido el respaldo legal para ejercer de presidente. Y pienso hacerlo con todas las consecuencias que me permite la normativa para intentar arreglar esta situación, que era del todo insoportable».
Asegura que «aquí hay delincuencia pura y dura: narcotráfico e incluso individuos que roban a los turistas en Cala Mayor».