Touroperadores alemanes, británicos y nórdicos han paralizado todas las operaciones de compraventa de hoteles en Mallorca por el sobreprecio que hay en estos momentos, que llega en algunos casos hasta el 40 % según la zona que se trate.
«Los precios se han disparado en los últimos tres años y es lógico que los grupos turísticos europeos se replanteen en estos momentos pagar las cantidades desorbitadas que piden los hoteleros por vender sus establecimientos, ya que se trata de una burbuja inmobiliaria propiciada por la caída en picado del turismo en Egipto, Túnez y Turquía por el terrorismo yihadista», señalan varios touroperadores.
Hoteles de tres y cuatro estrellas con 300 habitaciones que en una situación de normalidad se podían comprar por 6 y 7 millones de euros, en estos momentos se cotizan entre 10 y 12 millones de euros. Esta situación se está produciendo en la mayoría de las zonas turísticas de la Isla, principalmente en Platges de Muro, Cala Millor, Alcúdia-Can Picafort, Cala d'Or, Palmanova-Magaluf, Peguera y en la Platja de Palma. En Eivissa y Formentera también se está produciendo esta misma coyuntura, aunque en menor medida, en Menorca.