La actividad comercial en Son Sant Joan generó el pasado año un volumen de negocio de más de 70 millones de euros a AENA, un 14 % más respecto a 2014, principalmente por la mayor afluencia de pasajeros, por la revisión de los cánones anuales a las empresas y porque AENA ha apostado por aumentar la superficie comercial para incrementar sus ingresos.
En estos momentos el aeropuerto cuenta con unos 20.000 metros cuadrados de superficie comercial en el edificio terminal, de los cuales 9.550 corresponden a tiendas y el resto a restauración. A esto hay que sumar los alquileres de locales en otras zonas aeroportuarias.
La previsión para este ejercicio es superar esta cifra global, récord en la historia del aeropuerto palmesano, más aún cuando se tienen que renovar la mayor parte de concesiones, como así sucederá en el Módulo C en los próximos dos meses, que es por el que pasan más pasajeros. El pasado año lo hicieron 9 millones y la previsión es que este año lo hagan 11 millones de pasajeros.