ARCA pedirá al Ayuntamiento de Palma que evite la demolición sin licencia de la casa de la calle del Rector Vives ante los «nuevos valores patrimoniales» que asegura que han aparecido para catalogarla.
Según ha informado en un comunicado, la entidad pedirá la rectificación a la Comisión de Centro Histórico y Catálogo después de que se haya demolido sin licencia una parte del cierre de la pared de piedra de la casa de Génova.
ARCA asegura que los valores de la casa ya superan el paisajístico y arquitectónico, puesto que han descubierto «valores históricos muy destacados» como que el compositor Manuel de Falla (1876-1946) vivió en esta vivienda durante largas temporadas, la primera de ellas a partir de finales de febrero de 1933.
La entidad ha señalado que ya ha hecho saber a los responsables municipales estos hechos y ha pedido que actúen para hacer cumplir la legalidad. Así, exige la protección de esta «casa única porque los valores patrimoniales alcanzan también estas cuestiones de carácter cultural e históricas, además de los valores paisajísticos y arquitectónicos».
De Falla disfrutó de la estancia en la isla y los detalles se pueden apreciar en un libro editado en 1947 por Joan Maria Thomàs con el título de 'Manuel de Falla en la isla'.
Antoni Mulet i Gomila (1887-1966) era el propietario tanto de la casa de la calle del Rector Vives que alquiló a Manuel de Falla, conocida como Can Mulet de abajo, como de Can Mulet, donde había un museo y la propia vivienda. El folklorista era gran amigo de Joan Maria Thomàs y fue así como acordaron la residencia del compositor en Mallorca.
Manuel de Falla buscaba una casa tranquila para poder continuar la creación de 'La Atlántida' y la casa de la calle del Rector Vives fue entonces ideal para su tranquilidad.