El alcalde de Palma, José Hila, ha ofrecido la mañana de este jueves por primera vez el discurso de la Festa de l'Estendard, señalando que el 2015 ha sido «el año del cambio» donde se ha impuesto «una nueva forma de hacer política». El primer edil ha afirmado que este año que termina ha marcado «el final de las mayorías absolutas y el inicio de una etapa de diálogo».
Hila ha prometido, en una plaza de Cort abarrotada por cientos de personas, que el equipo de gobierno trabajará «para la gente, con la gente y pensando en Palma», pero «sobretodo» para recuperar «el orgullo de los palmesanos por su ciudad tras la humillación sufrida por la crisis y los recortes».
El alcalde ha afirmado que «hemos recibido una ciudad crispada y desatendida» y que Cort le quiere devolver la voz, destacando la accesibilidad hacia a la ciudadanía del equipo de gobierno, las consultas ciudadanas o la puesta en marcha de la oficina antidesahucios.
Para 2016 Hila prevé cambios importantes en Palma, desde la apertura del Palacio de Congresos a la reforma de la Policía Local.
Uno de los momentos más emotivos del discurso del alcalde, y que ha levantado los aplausos de los ciudadanos, ha sido cuando ha lamentado el asesinato de Gemma Vich en Sant Jordi a manos de su expareja, en el único caso de violencia machista que ha sufrido Palma este 2015. «No podemos tolerar que se repita», ha afirmado, indicando que es responsabilidad de todos educar a las nuevas generaciones para «erradicar» esta «lacra social».